06 de Septiembre: Paz con todos

Romanos 12:18 ¨Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres.¨

 

 

Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, luz y bendición para todos, que Dios sea nuestro motivo para mejorar cada día, Dios nos creó como seres especiales para que hagamos su voluntad diariamente y así lo alabemos, para que cuando hagamos su voluntad mostremos el reflejo de su brillo bendito a la humanidad. Compartamos este material para llevar esperanza a nuestro prójimo.

 

 

En el libro ¨El Arte de Perdonar¨, el autor muestra la diferencia entre perdón y reconciliación, él dice que se necesita una persona para para perdonar y son necesarias dos personas para la reconciliación, el perdón ocurre en la persona herida, mientras la reconciliación ocurre en la relación constante, entre las personas, lo ideal es que el perdón conduzca a la reconciliación, y como el propio nombre sugiere, esta se trata de que retorne la armonía que había antes, podemos decir que la reconciliación es el perdón trabajado de los dos lados, ella se hace necesaria cuando la paz es quebrada y una semilla de hostilidad fue plantada, no permitamos que la imaginación nos inspire a ensayar frases, imaginando vengarse, esto conducirá a una progresión de ira, haciendo difícil el entendimiento y hará más difícil la reconciliación,  por otro lado no podemos ser negativos diciendo que nada de eso funcionara, o que mediante la reconciliación todo va a quedar mejor que antes, para que la reconciliación acontezca es necesario que la confianza sea reconstruida, tenemos que abrir nuestros corazones y convertirnos en seres accesibles a las personas con las que deseamos reconciliarnos, aunque ellas no pidan perdón, el perdón precisa estar presente antes que el ofensor se aproxime, al perdonar removemos obstáculos, nosotros derribamos el muro que nos separaba del otro, tenemos dos opciones, perdonar o albergar amargura en el corazón,  la segunda opción implica la verdadera autodestrucción progresiva del ser humano, que pudiendo perdonar conserva rabias que dañan su salud. En el versículo Colosenses 3:13 Pablo nos dice: ¨ soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.¨, nosotros podemos oír los consejos pero es difícil ponerlos en práctica, sin embargo, pidamos a Dios ayuda para brillar ante el mundo perdonando a quien nos ofende y ayudando al prójimo brindándole palabras de salvación.

 

 

 

OREMOS

 

Amado Padre, en este día te pedimos desde lo profundo de nuestros corazones, que nos permitas perdonar a quienes nos ofenden y a contribuir con el prójimo, brindándole palabras de salvación. Ampáranos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.

 

Amen.

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