Salmos 32:5 ¨ Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado. Selah¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, hoy es un día maravilloso, un día para asumir nuevos retos, un día para superar nuevas situaciones, teniendo presente que con perseverancia y tranquilidad lo lograremos en el nombre de Jesús, en este sentido atendamos a lo que nos indica Jesús nuestro Salvador, en el versículo Juan 16:33 ¨Les digo todo esto para que encuentren paz en su unión conmigo. En el mundo, ustedes habrán de sufrir; pero tengan valor: yo he vencido al mundo.¨, por todo lo indicado, sigamos el ejemplo de Jesús quien obedeció los mandatos del Padre, y al proceder correctamente, logró vencer. Llevemos a todo lugar este mensaje, prediquemos sobre estas buenas cosas que aprendemos, porque cuando compartimos este tipo de materiales, bendecimos a otros.
En ocasiones dudamos en confesar nuestras cuestiones a Dios, pues él sabe todo respecto a nosotros, pero la palabra confesar, trae la idea de admitir, reconocer los errores, por eso es importante confesar nuestras cuestiones a Dios, confesar en el ámbito espiritual es estar de acuerdo con lo que Dios dice que es pecado, para muchos es difícil confesar, porque confesar es un reconocimiento de nuestra pequeñez, de nuestra fragilidad, de nuestra pecaminosidad, tanto para pedir perdón como para confesar, nosotros requerimos vencer a nuestro orgullo, a nuestra autosuficiencia, en la confesión nuestro tono de voz no es explicativo, ni justificativo, de aquello que hicimos, pero debe ser un tono de admisión de culpa, no es solo decir: ¨Dios yo siento mucho el error que cometí¨, pero si decirle a él Señor, he pecado contra ti, yo hice algo equivocado¨, uno de los mejores ejemplos de confesión que encontramos en la biblia es la del hijo prodigo, parábola que Jesús conto en Lucas 15, él hijo prodigo llego a ensayar lo que iba a hablar, tomo la actitud correcta y dijo así: ¨Partiré y volveré a mi padre, y le diré Padre yo peque contra el cielo y contra ti¨, su confesión fue específica y lo que dice la palabra de Dios en el versículo de Salmos 32:1 ¨Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado.¨, por eso Dios nos esta diciendo ahora mismo, que si tuviéremos la valentía de admitir nuestro pecado ahora mismo, seremos personas bienaventuradas porque recibiremos su perdón, y Dios nos concederá dominio y poder para que venzamos el dominio del pecado, coloquémonos en las manos de Dios, seamos humildes y confesemos nuestros pecados, y Dios va a perdonarnos y a capacitarnos para salir adelante.
OREMOS
Amado Padre, colocamos nuestras vidas en tus manos, favorécenos para que podamos vencer a la influencia del pecado, queremos ser siervos agradables a ti y progresar cada día en el camino a la salvación. Ampáranos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amen.