Mateo 20:30 ¨ Y dos ciegos que estaban sentados junto al camino, cuando oyeron que Jesús pasaba, clamaron, diciendo: !!Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!¨
Amados, que Dios alcance nuestros corazones en este momento y que la buena obra que inició en nuestras vidas pueda ser completada. La primera y principal actividad del día tiene que ser ponernos en contacto con el creador, oir su voz plasmada en la biblia, alimentarnos del conocimiento de la verdad, precisamos atender a este tipo de materiales y compartirlos para demostrar el amor al projimo.
Muchas personas no tienen el hábito de buscar a Dios, por eso no sienten la necesidad de un salvador en sus vidas, o apenas porque todo esta bien por el momento, la salud, la vida financiera, la familia, muchas veces Dios queda en segundo plano cuando la verdad, debería ser él quien estuviera primero en todo lo que somos o hacemos, es únicamente cuando el pecador requiere la necesidad de un salvador que su corazón se dilata en busca de aquel quien lo puede ayudar, ese es un principio espiritual enseñado en la palabra de Dios, cuando Jesus estuvo aquí en la tierra él atrajo a los enfermos, los sufridores, los rechazados, los pobres, las personas necesitadas de salvación, y que no podían encontrar auxilio en otra parte, la biblia relata que hace mucho tiempo el ciego Bartimeo estuvo a la espera de Jesus en la orilla de la carretera, multitudes que podían ver pasaban de un lado para el otro, pero no sentían deseo de ver a Jesus, apenas una mirada de fe seria capaz de traerles los beneficios de la gracia, pero vivian en la enfermedad, la pobreza, y en todas aquellas situaciones de sus vidas no sintierón la necesidad de buscar a Cristo, lo mismo no acontecia con el pobre ciego Bartimeo, su única esperanza se concentraba en Cristo, por eso lo esperaba por una oportunidad. ¿ Cuantos de nosotros formamos parte de esa multitud? Tenemos buena ropa, buenos empleos, todo parece perfecto a nuestros ojos, entonces vemos a Jesus pasar y lo ignoramos, pues no sentimos la necesidad de un salvador. Cierto día en que Bartimeo el ciego estaba esperando, Jesus llego y restauro la fe del ciego, Cristo no solo restauro la visión física, sino que también le fueron abiertos los ojos espirituales, los ojos del entendimiento, el sol de la justicia brillo sobre su vida. ¿ Cuantos de nosotros estamos muertos en pecado y aun asi no sentimos la necesidad de un salvador personal?. La necesidad puede ser satisfecha por un Dios capaz de restaurar nuestras vidas, entonces no dejemos para después lo que es realmente importante, busquemos a Dios ahora mismo, pues todos tenemos la necesidad espiritual de un salvador, asi podremos recibir la bendición que ansiamos, así que si estuviéremos pasando momentos difíciles confiemos en el Señor, abramos los ojos de la fe y tengamos presente lo que Jesús va a hacer hoy en nuestras vidas y nos bendecirá.
OREMOS:
Padre de Amor, gracias por tu palabra hoy, ayudanos como a Bartimeo el ciego, a no perder la oportunidad de abrir nuestros ojos espirituales, a mejorar continuamente en el camino de la salvación y a convertirnos en siervos agradables a ti. Contribuye con nosotros. Son las peticiones que, en nombre de Jesucristo, tu hijo hacemos en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.