Salmos 86:12-13 ¨ Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, Y glorificaré tu nombre para siempre. Porque tu misericordia es grande para conmigo, Y has librado mi alma de las profundidades del Seol.¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, la paz de Dios sea con todos, como Jesús saludaba a sus discípulos, nosotros hemos adoptado esa costumbre para saludarnos de una manera que refleje nuestro deseo de imitar al Jesús en su ejemplo de obediencia a la voluntad de Dios, deseando que esta paz de Dios que excede todo entendimiento humano llene totalmente nuestras vidas y las de nuestros seres queridos. Tengamos presente que todos somos invitados por la palabra bíblica a evangelizar sin cesar, por esto, compartamos este mensaje, todos somos invitados a hacerlo mediante la dinámica de la evangelización mediante el clic, que implica diseminar este material por medio de las redes sociales para llegar a más personas y lugares.
Este texto bíblico con que inicia este material fue escrito por David, quien tenía una necesidad de alabar y glorificar a Dios, desde lo más profundo de su corazón, porque el Padre Celestial lo merecía, y, merece, por todas las cosas que en su momento hizo en favor de David, y, por las que hace hoy por nosotros. Nosotros debemos emocionarnos cuando pensamos en Dios, él es el único que puede liberarnos de la muerte eterna, si por casualidad hemos estado en una cama de hospital, o, hemos tenido a un familiar en esa situación, quizá sin oxígeno, sin poder respirar, sin fuerzas para luchar contra una enfermedad terminal, y recibimos libramiento o lo presenciamos en otra persona, sepamos que fue el Dios creador que nos dio una nueva oportunidad, que nuestros corazones se muevan a agradecer, por el don de la vida, que nosotros confiemos siempre que todo lo que pasamos aquí, Dios lo está viendo, escuchando, y, considerando, por eso seamos agradecimos,
OREMOS
Padre querido, gracias por dejarnos saber que ante nuestros errores estas dispuesto a perdonarnos, bendícenos hoy, mañana y siempre, pues queremos cumplir tu voluntad y ser agradables a ti. Ayúdanos a seguir avanzando y a cumplir tu voluntad siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amen.