29 de Noviembre: Confiar y esperar en el Señor.

Jeremías 17:7 ¨ Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová.¨

https://reflexionescristianas.com.ve/

Padre Amado, gracias por el día de hoy, la bendición de permitirnos vivir un nuevo día. Feliz día, es hermosa la actitud que tomamos al buscar el diario alimento espiritual, y llenarnos de la palabra de Dios, lo cual siempre será algo que nos aporte cosas buenas, ese es el tipo de apoyo que hay que buscar para poder encarar con tranquilidad, los acontecimientos que ocurren diariamente, recordándonos que las pruebas nos fortalecen y si permanecemos en Dios, nada malo va a pasar, debido a que el tiene el control. Nuestro Creador nos manda a llevar la buena nueva de salvación a todo lugar. Vamos a hacerlo, compartiendo este material de todas las maneras posibles, teniendo presente que la mejor manera de predicar es demostrando actos que reflejen el amor de Dios.

 

Si leemos versos anteriores, notaremos que el profeta dice que es infeliz, el hombre que confía en el hombre, en el sentido de aquella persona que hace del ser humano su seguridad, pero por otro lado, bendito es aquel que confía en el Señor y cuya esperanza es el Señor. Desde que nuestros primeros padres, Adán y Eva, en el Edén desobedecieron a Dios, la naturaleza humana fue contaminada por el pecado, para ser restaurados nosotros requerimos de Dios y su provisión de sacrificio, la muerte de su hijo en nuestro lugar, restableció nuestro vínculo con el, confiar en el Señor es tener certeza de que Dios está presente en nosotros y que nuestras palabras y acciones deben glorificar el nombre de Dios, confianza es resultado de la fe, y esperanza es resultado de la confianza, no importa lo difícil de la jornada, si es llena de dificultades, estemos de buen animo, porque lo que importa es la certeza de la esperanza, de que al final seremos felices porque nuestra victoria viene del Señor, y si nuestra confianza es depositada en nosotros mismos, la esperanza se vuelve vana, porque depende de nuestro desempeño y no de Dios, y somos muy débiles, además tenemos fallas. Cuando un ser humano confía en el Señor, y deposita su esperanza en el, la palabra de Dios establece que ese ser humano es bendito, el es feliz y bienaventurado,  es una persona que confía y espera en el Señor. Nosotros nunca seremos bendecidos si ponemos nuestra confianza en nosotros mismos, muchas veces vivimos en el pecado secreto de creer que somos buenos, de que somos incluso mejores que los otros, eso nos ha apartado de Dios, la pregunta que queda de esta reflexión es: ¿Sera que somos felices?. Salomón nos da la respuesta en Proverbios 3:5.  A la luz de estas afirmaciones, si queremos ser felices confiemos solo en Dios, de todo corazón. Esta prédica es distinta a la que el mundo enseña, porque mientras el mundo enseña autoayuda, lo que realmente ayuda es la ayuda de lo alto. Busquemos esta ayuda siempre

OREMOS:

Padre amado, llenos de gratitud y alabanza a ti venimos en este momento porque eres maravilloso, siempre miras a tus hijos con cariño y bondad, cuando confiamos en ti somos mas que vencedores, porque tu poder nos capacita para la victoria completa. Queremos que nos apoyes para ser agradables a ti y cumplir tu voluntad. Así pedimos en nombre de Cristo.

Amen

 

INVITACIÒN:

Gran utilidad presentan los artículos relacionados a esta publicación los cuales sugerimos leer para clarificar la orientación de la palabra, recuerde dejar su comentario. Dios le bendiga.

Dejar una contestacion