18 de Noviembre: Él es

Salmos 24:7-8 ¨ Alzad, oh puertas, vuestras cabezas, Y alzaos vosotras, puertas eternas, Y entrará el Rey de gloria. ¿Quién es este Rey de gloria? Jehová el fuerte y valiente, Jehová el poderoso en batalla.¨

 

Amados, si deseamos recibir la bendición de Dios como presente para nuestras vidas, precisamos ganárnoslo siendo obedientes a sus mandatos, porque si cumplimos con la voluntad de Dios en nuestras vidas, resultados maravillosos obtendremos y con cada uno de ellos alabaremos a Dios. Empecemos realizando buenas obras difundiendo entre nuestro prójimo, este material.

 

 

Luego de la muerte y resurrección de Jesucristo nuestro Señor, llego la hora de subir al trono del padre, estaba listo para volver a las cortes celestiales, como divino vencedor, con las manos extendidas en bendición y con una firme promesa de su cuidado, Jesús sube, despacio ante sus discípulos, el estaba siendo atraído para el cielo por un poder mas fuerte, que cualquier atracción terrenal, mientras los discípulos continuaban mirando hacia arriba, ellos escucharon como música agradable, voces que se dirigían a ellos, esos ángeles pertenecían al grupo que lo estaba esperando, en una nube brillante para acompañar a Jesús a la morada celestial, todo el cielo estaba esperando para saludar al salvador, a su llegada a las cortes celestiales, al subir Jesús abrió el camino, y la multitud de esclavos liberados, en el momento de su resurrección esa multitud lo siguió, Lucas narra el momento exacto en que Jesús subió al cielo, escrito quedo esto en el libro de Hechos 1:9-11 ¨ Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos. Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.¨,  eso nos quiere decir que ese Cristo que se fue, así mismo volverá, y que la respuesta de nosotros a ese hecho es mostrar obediencia, ser mejores siervos cada vez, y sin duda recibiremos las dadivas prometidas.

 

 

OREMOS:

 

Padre de amor, permite que podamos cumplir diariamente tu voluntad, aplicar el amor al projimo y proceder correctamente, según lo que has dispuesto. Ayudanos a continuar progresando en tus caminos. Peticiones que te hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.

 

Amen.

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