Génesis 3:17 “Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, hoy es día de buenas noticias, y la verdad todos los días son de buenas noticias cuando buscamos andar en los caminos de Dios, cada vez que estudiamos la Biblia, comprendemos un poco más sobre la voluntad de Dios para nuestras vidas, ello nos permite transitar correctamente por el rumbo a la salvación y nos acerca a nuestro Padre Celestial. Compartamos este material y extendamos la bendición a nuestro prójimo.
Ninguna persona de las que ha vivido en el planeta ha tenido un privilegio tan grande como Adán y Eva, ellos conocieron el mundo perfecto y conversaban cara a cara con Dios, y pudieron convivir con los ángeles, ese fue un gran privilegio, esa primera pareja vivía una felicidad plena, entre ellos no había nada sino el más puro amor y una atmosfera celestial que marcaba al primer hogar instituido por Dios, todas las tardes el creador del universo era recibido por la pareja para una reunión donde ella oía palabras salidas de la suprema sabiduría del universo, en alguno de esos encuentros Dios le contó a Adán y Eva respecto a la guerra que hubo en el cielo, y de cómo Satanás iba a inducirlos a pecar contra la ley de Dios, entonces, tanto Dios como su enemigo, sabían que si la pareja cediese apenas un poco en relación a los principios establecidos por el gobierno divino, eso sería suficiente para que todo el equilibrio de la creación fuese alterado, y el clima general del Edén quedará ofuscado, Satanás sabe cómo hacernos presas fáciles, después de pecar Eva se convirtió en un agente del enemigo, llevando el fruto para su marido, Adán requería escoger y tomo la decisión equivocada, ciertamente el amor de Adán por Eva, era grande pero ningún amor puede ser mayor que el que debemos tener por nuestro Dios, Adán fallo conscientemente y si este error, fuese un enredo de una película romántica quizá sería una linda forma de demostrarse amor entre pareja, pero cuando hablamos de las cosas de Dios, la prioridad es siempre de él, pues cuando buscamos primero a Dios, el cuida de nuestro matrimonio, y de todas las áreas de nuestras vidas, Adán conscientemente escogió el pecado, junto a su elección vinieron las consecuencias, así después del pecado percibieron su desnudez, pues habían perdido el manto de la justicia de Dios que los cubría, entonces recogieron hojas e hicieron vestidos, esa fue la solución humana para buscar resolver el problema, pero nada de lo que hagamos o dejemos de hacer podrá salvarnos de la condenación del pecado, por eso vamos a buscar hoy el perdón que Cristo ofrece, porque el perdón de Dios nos liberta y nos hace nuevas personas, y libres de la culpa del pecado viviremos en la certeza de que la muerte de Jesús no fue en vano, si caímos y nos herimos tengamos la certeza de que Dios nos va a perdonar, como perdono a Adán y Eva, él nos espera de brazos abiertos, no hay pecado que Dios no pueda perdonar, solo hay pecadores que se niegan a acudir a Dios para solicitar perdón.
OREMOS:
Padre querido, así como perdonaste a Adán y a Eva, te pedimos que nos perdones también, porque somos tan débiles concédenos tu Espíritu para que seamos erguidos. Ayúdanos siempre. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.