03 de Agosto: Lidiando con los enemigos

Proverbios 16:7 ¨ Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar en paz con él.¨

 

Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, demos gracias a Dios por esta nueva oportunidad para seguir cumpliendo sus mandatos en nuestras vidas, sin duda esta práctica va a permitirnos andar en el camino a la salvación. Difundamos este material, para bendecir la vida del prójimo.

 

Donde sea que estemos y hacia el lugar que vayamos, siempre es posible encontrarnos con alguna persona que quiera crear obstáculos para nosotros, causarnos dificultades por envidia, o simplemente por mala voluntad, cuando el enemigo es visible, nos cuidamos y nos defendemos, nos protegemos, pero ¿Qué ocurre cuando no sabemos dónde está el enemigo?, ¿Cómo reaccionar cuando él anda disfrazado de amigo o se esconde en un círculo más próximo a nosotros?, ¿este versículo de hoy explica la manera de como Dios convierte a los enemigos en amigos?, Dios no usa una pose de magia, como muchas veces quisiéramos que ocurriese, él no toca el corazón del enemigo y el problema queda resuelto, a nosotros nos gustan los milagros instantáneos, seguimos la ley del menor esfuerzo, esperamos que todo caiga del cielo, pero las cosas con Dios no siempre son así, el responde al clamor de sus hijos, Dios está listo para convertir en amigos a nuestros enemigos, pero Dios utiliza un instrumento llamado ser humano, y en ese caso el ser humano somos nosotros, el verso de hoy, afirma que siendo agradable el camino de los hombres al Señor, él reconcilia con ellos a sus enemigos, el instrumento que Dios usa aquí es el propio camino de la persona, un camino agradable al Señor es un camino sin odio, sin rencor, sin dolor, todo eso es veneno para el alma, un corazón envenenado no está en condiciones para recibir al enemigo como amigo, porque el rencor genera rencor,  el odio genera odio, el dolor genera dolor, entonces, cuando vamos a Jesús y convivimos con él, el carácter del maestro se reproduce en nuestras vidas, y podemos pagar al mal con el bien, y podemos orar diciendo: ¨Señor perdónales, porque no saben lo que hacen¨, cuando permitimos que el Señor habite en nuestros corazones, Dios usa nuestros caminos, nuestros testimonios de amor y nuestra humildad, para tocar el corazón de nuestros enemigos, entonces los ojos de la persona que se opone a nosotros ellos se abren para comprender, que no hay motivos para la enemistad, y allí ocurre el milagro, siempre que la persona no ponga resistencia, la enemistad se convierte en amistad, por eso vamos a pedirle a Dios que nos de un corazón capaz de perdonar y amar a nuestros enemigos gratuitos, porque siendo el camino de los hombres agradable al Señor, la reconciliación es posible. Dios nos bendiga y nos permita pagar al mal con el bien, porque cada uno da lo que tiene.

 

 

 

 

OREMOS

 

Amado Padre, te alabamos por tu misericordia y gracia, pues nos permites conocer la importancia de pagar al mal con el bien y de agradarte en nuestros caminos para que la reconciliación sea posible con nuestros enemigos y adversarios. Ayúdanos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.

 

Amen.

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