Santiago 5:19-20 “Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver,”- “sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados.”
Padre nuestro, que tu gracia y tu paz nos alcance en todo momento, agradecidos estamos por este maravilloso día, la oportunidad especial de compartir tu palabra bendita siempre es valorada por nosotros, deseamos agradarte mediante alabanzas considerando este texto como símbolo para tu glorificación, instrumento con el cual se pretende contribuir a la evangelización de tu pueblo.
Amados, que la paz del Señor esté con todos y seamos siempre bendecidos. Muchos personajes de la biblia vivierón la experiencia de llevar personas hasta Jesús, Juan Bautista por ejemplo, se concentró en llevar personas de vuelta para la verdad, inspirar arrepentimiento y bautizarlas. El propio Jesús hablando de su misión describió su obra en términos semejantes, apartar a las personas del error y conducirlas hacia la verdad. En este orden de ideas, la existencia de la apostasía no era cierta, pero probablemente el apartamiento de la verdad se refiere a apostasía, no solo en la doctrina, sino también en el estilo de vida, en muchas oportunidades la primera lleva a la segunda, dudas comienzan a transformarse sobre nuestras creencias creando un comportamiento vacilante, e infelizmente nos conduce a la completa apostasía, entonces, salvar a un pecador del error lo conducirá a la bendición de salvar su alma de la muerte, resumiendo todo Santiago se expreso para que sus hermanos de la iglesia hicieran una obra semejante a la de Elías, llevando personas hacia Dios, eso requiere paciencia compasión, ternura y humildad. Muchas veces la persona está consciente de su pecado y no requiere que sea señalado o indicado, lo que ella más necesita es el perdón ejemplificado por Jesús, salvar personas de la muerte del alma sólo es posible mediante la cobertura de los pecados. Cuando aplicamos el evangelio en nuestras vidas nos volvemos instrumentos de la misericordia, siendo el perdón de Cristo quien cubre ese pecado colocandonos en comunión con Dios, por eso busquemos el perdón para nuestros pecados.
OREMOS:
Padre amado, por tu gracia infinita concédenos el perdón que requerimos, ayúdanos a andar en tus caminos por la habitación de Cristo en nuestros corazones, queremos hacer tu voluntad para ser siervos agradables a ti. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amén.