Mateo 12:34 ¨¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.¨
Amados, precisamos buscar cada día a de Jesús, pues él es el único camino que nos conducirá a Dios, y nuestro Padre Celestial, se agrada al notar que estamos cumpliendo su voluntad. Una forma maravillosa de alabar es meditando en la palabra bíblica, y una vez conocida obrar conforme a ella, y este es uno de los objetivos que persigue este material, a actuar de modo semejante a nuestro Salvador, en su ejemplo de obediencia a la voluntad de Dios. Compartamos este material para llevar esperanza al prójimo.
Generalmente, el lenguaje es una forma eficaz de revelar quienes somos, cuando Jesús dice: «que la manera y el contenido de nuestras palabras y expresiones comunicar a los otros, mucho de aquello que nosotros somos», y de hecho nuestras palabras reflejan nuestros sentimientos y emociones interiores, reflejan nuestras prioridades y deseos, muchas veces el lenguaje es utilizado para esconder y destorcer la realidad. Nuestro mundo sería mejor si por ejemplo políticos en ejercicio cumplieran sus promesas, las cuales son hechas en periodo electoral, la repetición de una mentira ejerce una gran influencia negativa, no solo sobre los otros sino sobre el propio mentiroso, las palabras son más que la revelación del carácter, las palabras tienen el poder de reaccionar sobre el carácter, los hombres son influenciados por sus propias palabras, una vez habiendo expresado una opinión o una decisión son muchas veces demasiado orgullosos para retractarse e intentan probar que están en lo correcto, creyendo que están llenos de razones, hasta que llegan a creer que realmente es así. Una mentira dicha varias veces parece hasta una verdad, que bendición seria si nos preocupáramos más por lo que hablamos, recordemos que las palabras tienen poder para destruir o salvar a las personas, por eso precisamos pedir a Dios que nos ayude y que tenga misericordia de nosotros para que tengamos palabras buenas, palabras sabias. A estos efectos, expresa el versículo Efesios 4:29 » Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.», atendamos a este consejo de Pablo el Apóstol, y cuidemos nuestras palabras, empleemos las palabras correctas para bendecir y edificar, para transmitir emociones positivas a nuestros oyentes o a nuestro auditorio, el Maestro de Galilea, siempre transmitió amor en sus expresiones y palabras, ya que nosotros estamos siguiendo su ejemplo, seamos como él. Vamos a bendecir a nuestro prójimo con palabras buenas. Que Dios nos bendiga en este propósito.
OREMOS
Padre Amado, otórganos sabiduría e inteligencia para poder expresar palabras que transmitan emociones positivas a nuestro prójimo, queremos brindar un buen ejemplo, para dar testimonio de tu presencia en nuestras vidas. Contribuye con nosotros siempre. Así pedimos en nombre de Jesucristo.
Amén.