105. Escogiendo el lado correcto

Mateo 27:23 ¨ Y el gobernador les dijo: Pues ¿qué mal ha hecho? Pero ellos gritaban aún más, diciendo: ¡Sea crucificado!¨

 

La paz de Dios sea con todos. Un abrazos fraternal y mantengámonos bendecidos desarrollando la meditación en la palabra de Dios, esta práctica hermosa nos lleva a tener una vida tranquila, apegada a los mandatos de Dios. Difundamos este material, porque muchas personas precisan conocer de él, para reencontrarse con el Señor Jesucristo.

 

 

 

La toma de decisiones es importante por demás en diversos aspectos de nuestras vidas, ellas determinan las posibilidades que tenemos de vivir un mejor o peor futuro, por eso es fundamental adoptar y tomar las mejores decisiones apegadas a principios y valores de bondad para obtener resultado de bien. En ese sentido, requerimos agarrarnos de la biblia, apegarnos al cumplimiento de la voluntad de Dios, para hacer las mejores decisiones. En el momento en que Jesús estaba siendo juzgado por Pilatos, el gobernante no percibió mal alguno en Jesús, Pilatos estaba acostumbrado a condenar a criminales, al mirar a los sujetos a los ojos él percibía la culpa, pero en el caso de Jesús, él se lavó las manos, absteniéndose de decidir, porque Jesús se comportaba diferente sus palabras eran pocas, su mirada era profunda, su manera de hablar era calmada y armoniosa, otra cosa que Pilatos había percibido era la multitud, normalmente las personas esperaban sus palabras y su juicio, pero aquella multitud estaba cargada de un odio brutal, era unánime que todos querían la crucifixión de ese hombre, pero parecía que toda esa multitud estaba siendo guiada por un único ser, de hecho estaba era Satanás, el odio estaba en sus ojos y el veneno en sus palabras. La pregunta de Pilatos, expresada en el versículo en estudio muestra su descontrol sobre la situación, Pilatos no quería condenar a Jesús, pero tuvo miedo de su desaprobación, que el pueblo desaprobase, hoy podemos juzgar a Pilatos como un tonto, pero muchas veces negamos a Cristo como lo hizo Pilatos por miedo a la reprobación popular, existe lo que está a la moda y lo que todos hacen, existe lo que todos piden que sea nuestra decisión, la cuestión es que en ocasiones esa decisión va en contra a lo que Jesús nos orientó, en su palabra. Quizá no exista una llave del éxito, pero con seguridad la llave del fracaso es querer agradar a todos, es vivir en busca de aprobación de todos, hay veces en que nos enfocamos tanto en lo que los otros hablan que dejamos que esas voces suenen tan alto que no conseguimos oír lo que Dios nos está diciendo, en ocasiones nos lavamos las manos como Pilatos, hoy Jesús nos invita a dejar de lado a la voz de la multitud, y escuchar su voz, porque él nos creó, nos ama y quiere lo mejor para nosotros. Si estamos a su lado todo va a estar bien.

 

 

 

 

OREMOS:

 

Padre Santo, ayúdanos a no ceder ante la presión de la multitud, a no confundirnos por las varias voces que tenemos en el mundo, concédenos las cualidades necesarias para permanecer firmes en tu palabra y obrar para agradarte. Así pedimos en nombre de Jesucristo.

 

Amén

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