Juan 13:6-7 “Entonces vino a Simón Pedro; y Pedro le dijo: Señor, ¿tú me lavas los pies?“ – “Respondió Jesús y le dijo: Lo que yo hago, tú no lo comprendes ahora; mas lo entenderás después. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, el tiempo pasa, el tiempo vuela, y nuestra amistad continua, siendo una buena relación, aunque personalmente no nos conocemos, este vínculo de amistad ha crecido bastante, por ese motivo todos los días oramos por ustedes, porque estamos unidos siguiendo el camino a la salvación, y aunque estos mensajes sean simples ojala que ellos puedan servir de guía y colocarnos mas cerca del Señor.
Era noche del día jueves, allí estaba Jesús para tomar una cena con sus discípulos, así que el tomo agua y una palangana, coloco agua en la palangana y fue lavando los pies de los discípulos y cuando llego para lavar los pies de Pedro, fue allí que Pedro dijo, las frases indicadas en el versículo, como confundido, porque generalmente quien hacia eso era una empleada o un sirviente, en la cabeza de Pedro, Jesús estaba siendo humillado con aquella actitud, y Pedro se expresó como dice el versículo, y Jesús le respondió de la manera indicada, Jesús le estaba diciendo: Pedro yo se que no estas entendiendo, estás pensando que estoy siendo humillado, pero un día vas a entender que estoy siendo humilde, y la humildad es una de las más lindas virtudes que el ser humano puede tener. Jesús sabía que cuando el se convirtiese, Pedro iba a ver la vida, con otros ojos, porque es así, la visión de Dios alera nuestra visión respecto a nosotros mismos y de los otros y del mundo. Jesús estaba allí lavando los pies de los discípulos, no a pesar de su grandeza, sino por causa de ella. Son las personas grandes las que sirven y actúan con humildad, la visión de Dios es diferente a la visión del hombre, por eso es que el profeta Isaías dice que los pensamientos de Dios están muy distantes, de nuestros pensamientos, así como el cielo esta distante de la tierra, los pensamientos de Dios están distantes de los nuestros, pero cuando nos convertimos al Señor y nuestras mentes se abren a las verdades eternas, en esos momentos pasamos a mirar con los ojos de Dios, por eso es que Jesús estaba convencido de que Pedro comprendería algún día. Que Dios nos bendiga y que nuestro sentimiento sea humildad y servicio.
OREMOS:
Padre amado, nosotros hoy venimos a ti para alabarte por el ejemplo de Jesús, y te pedimos que cambies nuestros corazones llenos de orgullo por corazones humildes, deseosos de servir y llenos de humildad. Pedimos tu ayuda, en nombre de Jesucristo.
Amen.