1 Corintios 2:9 “Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas, que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios y el Espíritu Santo nos acompañen siempre. Feliz Día, por demás estamos enterados de que Dios puede cambiar nuestras vidas cuando atendemos a su llamado, así ocurrió con Saulo quien fue convertido en Pablo, y así va a ocurrir progresivamente con todos los que estamos perfeccionando nuestras conductas mediante la reflexión de este tipo de materiales. Compartamos esta bendición con nuestro prójimo.
La situación puede estar complicada, pero con certeza todo va a pasar y Dios nos va a dar la victoria en todo momento, confiemos a cada instante, mantengamos firme a confianza en el Dios, el nos ayudara porque somos sus hijos amados, hoy vamos a meditar sobre la vida de Simón, cuyo nombre significa Dios oye. Existen nueve Simones en la Biblia, y dos de ellos eran discípulos del Señor, el primero y más conocido es Simón Pedro, todos lo conocemos y el segundo es Simón el Zelote, sobre el cual ahora hablaremos comenzando por la razón de ser llamado así, sepamos que en la época de Jesús habían cuatro partidos políticos entre los Judíos, los fariseos que eran los fundamentalistas en términos religiosos, también estaban los abuseos que eran religiosos liberales, ricos, aristocráticos y poderosos, encargados del templo y que negaban lo sobre natural, el tercer grupo eran azetas, llamados esenios, ellos eran celibaticos, Vivian en el desierto, que dedicaban la vida al estudio de la ley y los zelotes, a ese grupo es que Simón pertenecía, ese grupo odiaba a los romanos y deseaban acabar con ellos mediante la fuerza, entonces cuando Jesús llamo a Simón, el hacia parte del partido de los zelotes, es decir que Simón era un revolucionario, hoy debemos tener presente que si nosotros tenemos un pasado del cual nos sentimos avergonzados, estemos tranquilos, porque si Jesús llamo a aquel hombre, lo uso y transformo sin importar su pasado, la misma cosa puede ocurrir con nosotros, ser usados por Dios, ser cambiados de agua para vino, progresar en el camino de la salvación, tomemos la decisión de entregarnos a Jesús en este día. El versículo que encabeza el texto nos expresa lindas palabras que generalmente son utilizadas en relación a lo que Dios hará por nosotros con ocasión a la vida eterna, pero creamos que estas palabras se aplican a la obra de Dios en nuestras vidas ahora mismo, aquello que el Espíritu Santo puede hacer en nosotros trayéndonos paz, alegría, esperanza y transformando nuestras vidas, toda vez que el adversario nos muestre nuestro pasado, sepamos que es porque el tiene miedo de lo que Dios esta haciendo en nuestro presente y con vistas al futuro, por eso confiemos en el Señor, porque así como transformó a Simón el zelote, Dios puede cambiar nuestros corazones.
OREMOS:
Padre querido, nos colocamos en tus manos y te suplicamos que cambies nuestras vidas, que nos hagas mejores siervos, cumplidores de tu voluntad y merecedores de tus dadivas. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.