Marcos 6:37 “Respondiendo él, les dijo: Dadles vosotros de comer. Ellos le dijeron: ¿Que vayamos y compremos pan por doscientos denarios, y les demos de comer? “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, cada vez nos hace sentir más amados, más emocionados, con un mejor estado de ánimo para continuar avanzando en el rumbo a la salvación, saber que Dios nos cuida y quiere lo mejor para nosotros.
¿Alguna vez hemos sentido que Dios nos dio una misión imposible para realizar?. Muchas veces cuando tenemos una respuesta y no tenemos una salida, la frustración e incerteza nos dominan, y no sabemos qué hacer, los discípulos estaban así, una gran multitud se reunión alrededor de Jesús, y él tuvo compasión de ellos porque eran como ovejas sin pastor, después de pasar un día con ellas, ya era tarde y las personas se encontraban en un lugar desierto, viendo eso los discípulos preocupados se aproximaron a Jesús para decirle: ¨ Señor es horade mandar a las personas para que puedan regresar a las aldeas, y comprar algo para comer ¨, pero en el verso de hoy Jesús les responde a los discípulos, y los discípulos quedaron desorientados porque no sabían la manera de alimentar a una multitud, así que ellos le dieron a entender que tenían poco dinero para tan grande compra, ellos requerían de mucho dinero para comprar alimento para todos, era una misión imposible en este momento, pero Jesús les pregunto, así: ¿Cuántos panes y peces tienen ustedes?, ellos dijeron: tenemos cinco panes y dos peces, entonces fueron tomados los panes y peces, estos fueron bendecidos como se indica en versículos sucesivos de este capítulo, y la gente comió y se harto hasta sobro, porque se materializo el milagro de la multiplicación de panes y peces, y como resultado muchas mas personas comenzaron a seguir a Jesús, pero lo interesante de toda esta historia es que sepamos que para Dios no hay nada imposible, quizá para el ser humano común sea complicado y hasta imposible, pero Dios todo lo puede y precisamos confiar en el.
OREMOS:
Padre querido, venimos a ti llenos de necesidades, pero aun así confiamos en que en el exacto momento actuaras en nuestro favor y tu bendición nos llenara de satisfacción, por tanto continuamos preparándonos para ese maravilloso encuentro. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.