1 Corintios 3:1-2 ¨ De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.¨ – ¨ Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía,¨
Amados, la paz del Señor sea con todos. Feliz día, que bueno es estar reunidos una vez mas junto a la palabra bíblica para alimentar nuestras almas, este material es bueno porque nos incentiva al estudio de la palabra de Dios, pero es solo un aporte, lo indicado seria que durante tres o mas ocasiones a lo largo del día podamos meditar en la palabra de Dios y asi protegernos contra el ataque del enemigo.
Pablo ya había llevado el evangelio a la iglesia de Corintios, una iglesia con muchas diversidades, podemos decir que era una iglesia internacional, por ser corintios una ciudad portuaria que recibía personas de todas las religiones, y al dirigirse a los habitantes de esa ciudad Pablo dijo que había que referirse a ellos como carnales, ósea, que ellos estaban envueltos en muchas practicas equivocadas, había idolatría, inmoralidades sexuales, hasta la duda de que si Cristo ya había resucitado y si sus acciones eran contrarias a la enseñanza por ellos recibida, y para aquellos que iniciaron en el evangelio, Pablo había dado instrucciones básicas, él llamaba a eso de leche, fácil de digerir pero que algunos habían dejado el tiempo pasar y no habían progresado, para esos él no puede dar el alimento sólido, porque ellos no estaban listos, nosotros precisamos recibir la leche básica, pero requerimos avanzar hacia instrucciones mas desafiadoras de la palabra de Dios, realmente el plan de Dios es que nosotros crezcamos en todo. Es verdad que muchos cristianos no pasan de niños en la fe, porque dejan de aprender las cosas de lo alto y ese es nuestro deber como cristianos, es verdad que somos imperfectos, es verdad que en algún momento podemos actuar de manera errónea, pero nosotros precisamos de un crecimiento y es la maduridad espiritual la que nos permite eso, es el espíritu de la verdad lo que nos convierte en adultos en Cristo, pues solo el espíritu puede ayudarnos, moldeando en nosotros un carácter semejante al de Jesús, nuestro desafío es no parar de crecer, ese crecimiento viene del contacto constante con la palabra de Dios, de la oración y el testimonio cristiano, entonces que nosotros podamos ejercer esas prácticas espirituales.
OREMOS:
Padre amado, ayúdanos a ser diferentes de la iglesia de Corintos, en el sentido de que podamos crecer espiritualmente, que no seamos niños y podamos soportar fuertes enseñanzas que amolden nuestro carácter y lo tornen semejante al de Cristo. Contribuye con nosotros. Son las peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén.