Ezequiel 28:15 ¨ Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad.¨
Amados, que Dios alcance nuestros corazones en este momento y que la buena obra que inició en nuestras vidas pueda ser completada. Siempre existirán momentos de victoria y momentos de derrota, pero una constante debemos mantener es la práctica de la oración, esta nos renueva en fortaleza y nos permite mejorar en los aspectos de la vida con ayuda de nuestro Padre Celestial.
Existen personas que tienen gran facilidad para describir sus sentimientos, ellas saben identificar que es bueno y que es malo, además consiguen lidiar con las insatisfacciones, nosotros podemos encontrar herramientas útiles para estos fines en el texto de hoy, por tanto tenemos en este verso la descripción de alguien que era considerado perfecto desde su nacimiento, desde su creación. La palabra perfecto significa completo algo que no necesita de nada o a que no le hace falta nada, todavía no es eso lo que el texto nos muestra, igual siendo completo, surgió la inequidad en el corazón del ángel Lucifer, la palabra inequidad significa injusticia, alguien creado de forma completa sintió que se cometió una injusticia contra él, mientras la razón que ocasiono el cambio en Lucifer no nos fue indicada en el texto, podemos inferir que se trató de que existió una falta de conocimiento en su propósito, lo que lo llevo a la confusión y se salió de la línea. Nosotros podemos sentir que se han cometido injusticias contra nosotros y aparentemente no tener motivos para eso, podemos percibir que un dia estamos felices y completos, pero en otros días estamos malhumorados, en ocasiones nos pasa eso y no conseguimos entender la verdadera naturaleza de nuestros sentimientos, si eso nos ha llevado a vivir una vida de insatisfacción, sepamos que debemos conversar con Jesús en ese sentido, contemos todo lo que hemos sentido al Señor, seamos sinceros en admitir que precisamos de su ayuda para comprender la naturaleza de nuestros sentimientos, Dios es nuestro creador y sabe como funcionamos, el va a entender toda oración sincera que hagamos.
OREMOS:
Padre de Amor, gracias por las bendiciones que nos otorgas, permítenos comprender la naturaleza de nuestros sentimientos, a ser más felices en relación a los acontecimientos que se presentan en nuestras vidas, ayúdanos a comprender que todo es pasajero excepto nuestra cualidad de ser hijos tuyos. Son las peticiones que, en nombre de Jesucristo, tu hijo hacemos en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.