Marcos 12:17 ¨Respondiendo Jesús, les dijo: Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios. Y se maravillaron de él.¨
La paz del Señor sea con todos. Gocémonos en la alabanza, pues somos amados por Dios, el hecho de haber entregado a su único hijo, quien muriera en la Cruz para salvarnos y libertarnos del pecado, es un gran acto de amor. Jesús nuestro Salvador, a lo largo de su ministerio y su vida en general, enfrento diversas situaciones de todo tipo, él siempre mantuvo control para poder dar las respuestas acertadas ante cada situación, y hoy nos solicita que sigamos su ejemplo, y evitemos caer en provocaciones buscando mantener el control, actuando pausadamente, expresándonos pausadamente. Todo va a mejorar, claro que si, compartamos este material que bendice nuestras vidas, precisamos llegar a mas personas y lugares.
Las riquezas mundanas pueden cautivar a muchas personas, hacen que muchos se vendan a los lujos de este mundo, y para alcanzar tal estatus hay gente dispuesta hasta a matar, a robar, a mentir y a muchas cosas más, ellas dejan el amor de lado para para alcanzar sus ambiciones, desde que el mundo es mundo eso ocurre, y algunas veces, los negocios, las políticas, las ambiciones, se mezclan con la religión. Jesús durante su ministerio, fue afrontado por maestros de la ley, aquellos fariseos, y después de haber contado una parábola que tenía el objetivo de explicar, que el reino de Dios es para todos, muchos no quisieron participar de él, Jesús era interrogado, por muchos que buscaban, encontrar en él, algún defecto, algún motivo para acusarlo, para arrestarlo, para matarlo. De esas muchas preguntas, una de ellas era que si deberían pagar un tributo al Cesar, el propósito de la pregunta era colocar a Jesús en un callejón sin salida, cualquiera que fuera su respuesta, afirmativa o negativa, igual Jesús estaría en problemas con alguno de los grupos, si Jesús dijera que se debía pagar el tributo al Cesar, los judíos que odiaban la opresión, que Roma tenía sobre la ciudad de Jerusalén atacarían a Jesús como a un aliado, del imperio romano, pues al final ellos no se sentían bien pagando impuestos. Si Jesús respondía que el tributo no debería ser pagado, él encontraría un serio problema con los soldados romanos que eran muchos en aquella región, y responsables por ese tipo de cobranza, por eso Jesús con su sabiduría mando a que ellos tomasen una moneda, y al cogerla, pregunto a sus acusadores sobre ¿De quién era la imagen allí gravada?, y todos respondieron: ¨De Cesar¨, y Jesús expreso algo maravilloso, una ocurrencia sin igual. Jesús ese día le enseño a su auditorio, que ellos no deberían mezclar las cosas del mundo y las cosas de Dios, y dio una respuesta que los dejo sin palabras, semejante a aquellos días, muchas personas están mezclando las cosas de Dios con las cosas del mundo, pero tarde o temprano, van a llevarse una sorpresa, antes de que eso ocurra, Cristo quiere rescatarnos para que tengamos más valor, por eso tengamos cuidado con las cosas de este mundo, no mezclemos lo santo y lo profano, seamos atentos a las orientaciones bíblicas y no nos desviemos ni a la derecha, ni a la izquierda, y recogeremos buenos frutos.
OREMOS:
Padre querido, gracias por la enseñanza bíblica de hoy que nos advierte que debemos dar a Dios lo que es de Dios y al Cesar lo que es del Cesar, para que no hagamos mezclas entre lo santo y lo profano, para que seamos individuos guiados por las orientaciones que nos has dado en la biblia y podamos mejorar nuestras vidas de manera constante, para así agradarte. Colabora con nosotros siempre. Son las peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén.