362 Requerimos de un milagro

Romanos 4:18-21 ¨ Él creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia. Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara. Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido;¨

 

La paz de Dios sea con todos, es un inmenso placer estar reunidos en este lugar para estudiar la palabra de Dios, y compartirla para convertirnos en instrumentos de bendición, sigamos andando con fe este camino. Recordemos que debemos siempre perseverar, y tener fe, confiar en que aunque se nos cierren mil puertas, Dios abrirá cinco mil portones, para que seamos bendecidos.

 

 

Posiblemente esperamos ya por algo, sin esperanza, así como Abraham, consideremos que todos los obstáculos se presentan, nos incomodan, y demás, pero nunca dudemos de la promesa de Dios, nunca dudemos de la fuerza de nuestro Dios, él es TODOPODEROSO, mientras nosotros, por nuestras propias fuerzas no conseguimos actuar, por eso necesitamos contar con ese Dios, que tiene todo el poder, y, que nos ama mucho, nuestro Dios, es el Dios de lo imposible, él es el Dios de los milagros, y si hoy requerimos de un milagro, si deseamos mucho que algo ocurra de manera sobrenatural, clamemos a Dios con un corazón sincero, para que ese Dios maravilloso escuche, y conteste a nuestro pedido, él va a responder nuestra oración. Solo requerimos orar.

 

 

OREMOS:

 

Padre Adorado, gracias por indicarnos la manera para presentar nuestras solicitudes, conocemos de tu poder, y, siempre nos revelas tu amor, por favor opera en nuestras vidas, y, permite que se materialice el milagro para que seamos bendecidos, y, convertirnos en instrumentos de bendición, pues reflejaremos parte de esa bendición a nuestro prójimo, especialmente a las personas que nos rodean. Cuídanos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.

 

Amén

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