28.  Día de los padres

Mateo 6:9 ¨ Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. ¨

Oración por Venezuela

La paz del Señor sea con ustedes. Que placer grande es estar reunidos hoy, siendo privilegiados por atender a la orientación de Dios, que va en consonancia al deseo que Dios tiene de hacernos vivir experiencias maravillosas, que den un ejemplo de su presencia en nosotros y lleven al prójimo a seguir el ejemplo de andar por el camino a la salvación.

 

 

Todos esos días de celebración, son en algún sentido, fechas que el comercio inventa para obtener ganancias o imponer costumbres de gastos especiales, realmente son contrarios, al texto de Proverbios 21:20,  precisamos usar los recursos con sabiduría, esto no significa que no se les pueda dar un regalo en alguna fecha a padres, madres, hijos, y otros, solo que precisamos apartarnos de la influencia del mal, para poder vivir libres de pecado. En cierta ocasión los discípulos notaron que Jesús estaba orando, ellos quedaron impresionados con la forma con la que Jesús oraba, la belleza de su oración, entonces cuando Jesús termino no orar, ellos le pidieron que los enseñara a orar así como un día Juan Bautista enseño a los discípulos a orar, y es en ese contexto que Jesús empieza a enseñarles la oración dominical u oración del Señor, o el ¨Padre Nuestro¨, en esta oración queda claro que Jesús nos enseña a llamar a Dios como ¨Padre¨. Esas son formas humanas que Dios usa para revelarse ante la humanidad, para dejar claro cuanto el ama a sus criaturas, Jesús nos enseña a llamar a Dios como ¨Padre¨. Cuando pensamos en un Padre Celestial, debemos pensar en un padre que tiene todo el cuidado, todo el amor, todo el celo para mantener bien a sus hijos, para alimentarlos, cuidarlos, librarlos del mal, del sufrimiento, del dolor, es así que debemos exponernos a Dios, como un padre que ama y desea siempre nuestro bien. El ¨Padre Celestial¨ nos cuida a nosotros para que cuidemos a nuestros hijos y a todo aquel que necesitare cuidado, y podamos brindarle nuestro apoyo. Vamos a sentirnos amados por el Padre Celestial, cumplamos sus mandatos, seamos obedientes, y sin duda, grandes cosas ocurrirán en nuestras vidas.

 

 

 

 

OREMOS:

Padre Celestial, bendícenos siempre para poder ayudar con parte de esas bendiciones a las personas que necesitan de nuestro apoyo, concédenos inteligencia y sabiduría para tener mejores resultados en cada una de las practicas que realizamos, pues todas son para glorificarte. Ayúdanos siempre. Son las peticiones que en nombre de Jesucristo, hacemos hoy.

 

Amen.

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