18 de Noviembre: Si hice mal

Salmos 7:3-5 “Jehová Dios mío, si yo he hecho esto, Si hay en mis manos iniquidad;¨ –  “Si he dado mal pago al que estaba en paz conmigo (Antes he libertado al que sin causa era mi enemigo),¨ – “Persiga el enemigo mi alma, y alcáncela; Huelle en tierra mi vida, Y mi honra ponga en el polvo. Selah¨

 

 

 

Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, la protección de Dios para sus hijos obedientes a sus mandatos es maravillosa, y una muestra de su inagotable amor, pues denota que nuestras vidas son regalos de Dios. Así como reconocemos la presencia de Dios en nuestras vidas, debemos considerar la presencia de una naturaleza pecaminosa innata del ser humano, pero podemos achicarla y disminuirla o hasta controlarla, si obramos teniendo como regla de obligatorio cumplimiento, el obrar conforme a las disposiciones de Dios, una vez cumplamos con ello las bendiciones empezarán a mostrarse en nuestras vidas. Ahora, cumpliendo parte del llamado a la predica universal y a la demostración del amor al prójimo, compartamos este material en todos los momentos de nuestras vidas, para que este material transportador de esperanza llegue cada vez a más lugares y personas.

 

 

Aquí David se acuerda de varias veces en que salvó la vida de Saúl, quien lo perseguía sin motivo. Por aproximadamente dos veces David tuvo oportunidad de matar a su perseguidor, por la espalda pero no levanto la mano contra el ungido del Señor, es claro que como David todos nosotros somos pecadores, no hay bien natural en nosotros pero cuando buscamos a Dios, él promete perdonar nuestras inequidades, nuestros pecados, su gracia nos cubre de justicia, y nos renueva cada dia. Cuanto mas nosotros estudiamos este libro, mientras mas leemos la Biblia, más comenzamos a imitar la bondad de Dios, mientras más oramos, más encontramos refugio contra la tentación, asi nos tornamos mas fuertes contra el pecado, mas justos e integros en lo que hacemos y decimos, porque Dios es quien nos guía, fue en esa gracia que David afirmo su integridad, que por ser y hablar la verdad y actuar con justicia, David podía reclamar la salvación que Dios prometió, esto no era orgullo propio pero si humildad, humilde confianza en el juicio divino, por eso David le hablo a Dios de forma tan osada ¨Señor, si yo hice mal, que yo sea punido por eso pero si hice bien. Levanta tu mano y con indignación destruye a los enemigos¨, quizá estemos buscando actuar como Dios quiere, con bondad, verdad y justicia, en todo lo que hacemos y hablamos pero si gente mala se levantare contra nosotros con calumnias, mentiras, entonces perseveremos y esperemos en Dios, si reconocemos no tener culpa en lo que están diciendo no hay razón para bajar la cabeza, no hay que preocuparse, permanezcamos firmes en aquello que Dios nos esta pidiendo, y no perdamos tiempo discutiendo con locos, ni perdamos la razón delante de la provocación, solo busquemos a Dios, pidámosle cumplir su promesa de defendernos, las personas pueden manchar nuestra reputación, pero el tiempo va a mostrar quien es quien, y que Dios nos favorecerá.

 

 

OREMOS:

 

Padre querido, ayúdanos a confiar cada vez más en ti, y si hemos hecho mal a alguien entonces perdónanos pero si hemos sido falsamente acusados, haz justicia por nosotros colocamos nuestras vidas en tus manos. Ayúdanos mucho. Para mejorar cada vez en nuestra caminada Cristiana, hacer tu voluntad y convertirnos en merecedores de tus dadivas de salvación para agradarte y glorificarte, es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.

 

Amen.

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