176 Dios y la salud de su pueblo

Éxodo 15:26 ¨ y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu sanador.¨

 

 

 

Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, la paz de Dios sea con todos, este es un buen momento para agradecer a nuestro Dios por toda la influencia que tienen en nuestras vidas, realmente colocarnos en sus manos a diario y alimentarnos de su palabra es un lindo acto al cual estamos invitados y precisamos invitar a otros para que esta bendición sea compartida.

 

 

Nuestro Dios es tan bueno que se preocupa por nosotros en todos los aspectos de la vida, Dios había sido guía de Israel, además de padre, guía, sustentador, mantenedor, nuestro buen Dios se presentó como médico, que curaba las enfermedades, nuestro Dios se preocupa con todos los aspectos de nuestra vida, con todas las adversidades que el pueblo de Israel enfrento en el desierto, Dios les hablaba desde la columna de nubes, diciendo: lo que ellos deberían oír, y la palabra de Dios nos da las correctas indicaciones. Escuchando la voz de Dios, los hebreos recibieron tales bendiciones y entre sus tribus no hubo un solo enfermo, esto lo enseña el Salmo 105:37. Aun hoy tenemos varios consejos de la biblia sobre salud, la biblia presenta nuestro cuerpo como tempo del Espíritu Santo, y en Levítico 11, encontramos una ley sobre lo que podemos y no podemos comer, la palabra de Dios está repleta de cuidados para nosotros, que envuelven a nuestra salud, nuestro bienestar porque Dios se preocupa también con eso, pues Dios quiere utilizarnos, para ayudar a otras personas a conocer estos principios, Dios no solamente nos orienta sino que también está dispuesto a ayudarnos, para que tengamos una vida saludable, por eso hagamos caso a aquello que él nos enseña en su palabra, estemos atentos a las orientaciones divinas,  para que nuestro cuerpo, templo del Espíritu Santo sea saludable, donde Dios sienta placer de habitar, vamos a adoptar como propósito, vivir en base a las enseñanzas de Dios.

 

 

 

OREMOS

 

Padre querido, comprendemos que somos templos de Espíritu Santo, entendemos que deseas que tengamos salud, por eso ayúdanos en este día a estar atentos a tus consejos. Contribuye con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.

 

Amen.

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