Mateo 13:45 ” También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, ” – ” que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró. “
Señor todopoderoso, agradecemos por permitirnos otra vez compartir tu palabra bendita, indicando aplicaciones a la realidad actual, sobre cada versículo que compone la sagrada biblia, extiende tu gracia y bendición sobre el texto en desarrollo para que cumpla con los fines evangelizadores previstos.
Amados, que la paz del Señor esté con todos y seamos siempre bendecidos. Cuando Jesús comparó al cielo con una perla de gran valor, deseo llevar a toda persona a apreciar esta perla por encima de todo, la poseción de la perla que es Jesucristo es el simbolo de riqueza más alto, es un tesoro superior a todos los tesoros terrestres, existen alguno que siempre estan buscando la perla excelente, entonces no hacen renuncia completa de sus malos habitos, no mueren para su propio yo a fin de que Cristo viva en ellos, por eso no encuentran la perla preciosa porque no experimentaron lo que era tener paz y armonia, en el corazon porque sin haberse entregado a si mismos no existió descanso ni alegría, estas personas eran casi cristianos pero no enteros, parece que entrarian al reino de Dios pero quedan en la puerta de afuera, casi salvos pero enteramente perdidos, la parabola del negociante representa a alguien vendiendo todo lo que tenia para comprar la perla, esa es una linda representación de aquellos que aman la verdad tanto que renuncian a sus posesiones totalmente para entrar en pose de la perla, por la fe, agarran la salvacion a causa del sacrificio del hijo de Dios, la justicia de Cristo no tiene manchas, Cristo aceptara a quienes vengan a él, pero no aceptara pretensiones ni hipocresias, el es nuestra esperanza, por sus acciones nuestros corazones pueden ser guardados.
OREMOS:
Padre Amado, ayúdanos a cambiar cualquier cosa por la perla de gran valor, a considerar el sacrificio de Jesus en la cruz, a realizar tu voluntad para ser siervos agradables a ti. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen