Juan 5:28-29 “No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; “ – “y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, que bueno es poder juntos disfrutar este momento de reflexión en la palabra de Dios, sin duda esta ha sido una buena elección, asi como lo será el gesto de compartir este material con nuestro prójimo para llevarle bienestar y a la vez cumplir el mandato de amar al prójimo.
Las palabras de Jesús en este día establecen dos verdades incuestionables sobre el estado del hombre en la muerte, es lo siguiente: en primer lugar la muerte no es el fin, ella es una intrusa en los planes del creador, pues Dios creo al ser humano para tener vida y vida eterna, pero lamentablemente con la desobediencia de nuestros primeros padre Adán y Eva, con la entrada del pecado en el mundo, Pablo va a decir que la muerte paso a todos los hombres porque todos pecaron, eso está escrito en el libro de romanos, pero la muerte no es el fin, ella es con certeza apenas una coma en la vida y la existencia del Cristiano, ella es la principal consecuencia del pecado, o mejor, la muerte es la principal consecuencia de la separación del hombre para con Dios, que es la única fuente de vida, en este texto Jesús está diciendo que el vino a deshacer las consecuencias del pecado inclusive de la muerte, sea ella física o espiritual, por eso el declaro ¨ De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. ¨, lo interesante es que los líderes judíos, ellos querían matar al donador de la vida, parece cómico si no fuese trágico, y esta es la segunda verdad establecida por Cristo, en el texto de hoy. El es el propio donador de la vida, y por ser donador de la vida, el traerá la vida de nuevo a todos los que escucharen sus palabras, y que creyeren en su nombre, en creer en Dios, un Dios que lo envió a este mundo para que nos salvara de nuestros pecados, entonces la muerte no es el fin. Cristo, la fuente de vida, un día él va a cumplir un día la promesa hecha, esa promesa preciosa de despertar a aquellos que duermen, el apóstol Pablo dice que habrá un día en que cuando Cristo de la orden, su voz será oída, la trompeta de Dios resonara, y Jesús bajara de los cielos, y los muertos en Cristo van a resucitar primero, Pablo enseñó eso, él estaba de acuerdo con la enseñanza de Cristo respecto a la resurrección, y un detalle importante de nuestro texto de hoy, habrá una resurrección para la vida y otra resurrección para el juicio, o condena y nosotros tenemos la oportunidad hoy de aceptar a Cristo que es el donador de la vida, para tener la garantía de que un día nosotros recibiremos de sus bondadosas manos la vida eterna, la corona de la vida eterna, que hoy ese sea el deseo de nuestros corazones, y que podamos creer en Cristo con toda la fe que poseemos, y que el nos prepare para el glorioso día de su regreso.
OREMOS:
Padre querido, gracias por las promesas de tu palabra, de que la muerte no es el fin, pero que Cristo siendo donador de la vida, el va a traer a los muertos a la vida, y va a transformar a los vivos e iremos contigo para la eternidad, requerimos cumplir todos tus mandatos, ser agradables a ti y glorificarte. Contribuye con nosotros. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.