Salmos 119:50 ¨Ella es mi consuelo en mi aflicción, Porque tu dicho me ha vivificado.¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, que Dios sea nuestro motivo para mejorar cada día, Dios nos creó como seres especiales para que hagamos su voluntad diariamente y así lo alabemos, para que cuando hagamos su voluntad mostremos el reflejo de su brillo bendito a la humanidad. Compartamos este material para llevar esperanza a nuestro prójimo.
Muchos predicadores de la iglesia cristiana especialmente al inicio en la iglesia apostólica o primitiva, muchos dieron la vida por las verdades entregadas por Cristo, que mas tarde empezaron a formar parte de la santa biblia, la escrituras cristianas. Esteban, el primer mártir de la iglesia cristiana, fue apedreado a morir, Pedro fue crucificado de cabeza para abajo, Andrés según unos estudiosos fue crucificado y permaneció colgado en la cruz por tres días hasta morir, Bartolomé fue decapitado, Marcos fue arrastrado hasta la muerte, Juan fue lanzado en aceite caliente pero fue salvado de manera maravillosa por Dios, Pablo fue decapitado, En Francia, en el siglo XVI, cuando Roberto Oghier fue presionado a renunciar a su fe para salvarse, dijo ¨Creo en lo que los santos profetas y apóstoles escribieron, y en esa fe viviré y moriré¨, en España a principios del año 1600un joven llamado Juliano consiguió vender biblias a muchas personas, pero luego fue preso y capturado, por la inquisición, en la cárcel él encontró a muchas personas que habían comprado sus biblias. Alabado sea el Señor por su palabra, por su bendita palabra, hay un maravilloso texto de Pablo donde él nos habla respecto al valor de las escrituras sagradas, es 2 Timoteo 3:16-17 ¨Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,¨ – ¨a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.¨. Dios sea alabado por esta palabra, vivamos por esta palabra, y abracémonos a ella para ser mejores siervos cada vez.
OREMOS
Amado Padre, te alabamos por toda tu obra y en especial por tu amor hacia nosotros, condúcenos y motívanos para seguir avanzando en todas las situaciones, dejando atrás las sombras y fracasos del pasado, solo enfocándonos en Jesucristo como objetivo y mantenernos progresando constantemente para alcanzar bendición. Ampáranos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amen.