Éxodo 25:8 ¨ Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos.¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz día, las misericordias de Dios se renuevan y con ellas una nueva oportunidad para reunirnos junto a la Biblia para meditar sobre las enseñanzas del Padre. Compartamos este valioso material con nuestros semejantes.
Aunque muchos no consideren ese asunto de gran relevancia el santuario de Dios, puede ser considerado la temática más importante de la Biblia Hebraica en el antiguo testamento, ese tema es crucial para el entendimiento de muchas imágenes, que van a ser reproducidas en el nuevo testamento que también expone parte del ministerio Cristiano, al estudiar el contexto de la propuesta de un santuario percibimos que ella se da después de la consolidación, cuando se cella la alianza entre Dios y su pueblo, es después que Dios liberta, cuida, mantiene, es que establece un lugar para su habitación y propósito, el verso de hoy aunque corto puede ser dividido en tres partes, primero HARAN, segundo UN SANTUARIO, y tercero HABITARE, tres partes claras y lo que podemos aprender con esa división es que primero el santuario es hecho para Dios, y no es hecho para el ser humano o la nación de Israel, él es hecho para Dios, segundo punto es que el santuario es el lugar santo o sea separado para una finalidad inminentemente espiritual y religiosa, tercer punto Dios quiere habitar en medio de su pueblo y además fue siempre deseo del Señor estar con nosotros, por eso el creó un jardín para habitar con el hombre, el propósito de la construcción del Santuario es que Dios quiere habitar en medio de nosotros, el termino hebraico para habitar, se compone por una preposición que significa EN MEDIO, por tal motivo Dios no quería solo estar en medio sino habitar con ellos, Dios se encontraba con su pueblo mediante su manifestación Diaria de gloria, esa gloria irradiaría en otras naciones vecinas a Israel, el segundo propósito del santuario era resolver el problema del pecado, de allí la importancia de este tema, la parte más linda de este texto es cuando Dios no solo quiere habitar en medio de nosotros sino atreves de nosotros, nuestros corazones también pueden tornarse un lugar para la habitación de Dios, eso ocurre cuando abrimos nuestros corazones y permitimos que Cristo haga hogar en él, logrando resplandecer mediante nosotros, por eso vamos a aprovechar este día para realizar actos que honren y glorifiquen a nuestro Dios.
OREMOS:
Padre querido, colocamos nuestras vidas en tus manos, para que nos conduzcas a la gran bendición que es ser considerados por ti como buenos siervos, merecedores de las dadivas que tienes reservadas, permítenos siempre hacer tu voluntad y contribuye con nosotros para que esta sea cumplida. Son las peticiones que en nombre de Cristo te hacemos hoy.
Amen.