Apocalipsis 2:7 ¨ El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.¨
La paz de Dios sea con todos. Recibamos la bendición de Dios. Andemos permanentemente de buen ánimo, Dios nos da la felicidad y alegría necesaria, la razón por la que hoy tenemos el privilegio de alimentarnos con este mensaje, es que por la gracia de Dios, mediante ella se nos ha concedido un nuevo día de vida, para que continuemos progresando en el camino, de la salvación. Sigamos predicando y evangelizando, procedamos con fe, porque será sorprendente lo que Dios va a hacer con nosotros como medio conductor de bendición.
Hoy hemos llegado al número ciento once, este número es especial pues está conformado por tres números uno, recordándonos sutilmente que debemos dar prioridad a la Santísima Trinidad, conformada por el Padre, Hijo y Espíritu Santo, de esa manera tendremos una mejor vida. Hoy iniciaremos un estudio sobre los mensajes enviados a las siete iglesias del apocalipsis, cada una de esas iglesias recibió un mensaje especial, proveniente de Cristo y también venia incluida en ese mensaje, una promesa para aquel que venciera en la carrera espiritual, y desde hoy durante siete días, vamos a estudiar esas promesas hechas para nosotros, comencemos con la iglesia de Éfeso. La iglesia de Éfeso representa a los cristianos que vivieron o a la iglesia cristiana del año 31 año de la muerte de Jesús, hasta el año 100 que fue aproximadamente el año de la muerte de Juan, el escritor del libro Apocalipsis. El pueblo de la iglesia de Éfeso, eran los propios apóstoles y luego de la muerte de estos aquellos que ellos convirtieron, esta iglesia es caracterizada como una iglesia pura, como una iglesia victoriosa, y eso nos recuerda a las grandes victorias, del evangelio que se encuentran descritas en el libro de actos, este versículo que estudiamos hoy presenta una promesa para los vencedores, pues ¨El vencedor podrá alimentarse del árbol de la vida que se encuentra en el paraíso de Dios¨. esa expresión de árbol de la vida nos lleva al libro de Génesis, y seguro recordamos que Dios al crear todo, coloco en el jardín del Edén el árbol del conocimiento del bien y el mal que era una prueba para Adán y Eva, y junto al árbol del conocimiento del bien y el mal, estaba el árbol de la vida. Quien comiera del árbol de la vida, perpetuaría su existencia, pero Adán y Eva no sabían de esto, pues primero precisaban de adquirir el conocimiento, así cuando los primeros padres de la humanidad, comieron del árbol del conocimiento del bien y el mal, fueron expulsados del jardín del Edén, pues Dios estaba protegiendo al árbol de la vida, porque el plan de la serpiente era hacer que Adán y Eva comieran de ambos árboles y poder burlar totalmente a Dios. Pero ahora, el libro de Apocalipsis, establece que aquello que fue perdido en aquel tiempo, nos será devuelto en la nueva tierra, si cumpliendo la voluntad de Dios y completando la caminata por la salvación, resultamos victoriosos, y en consecuencia merecedores de esa bendición de alimentarnos del árbol de la vida. Así que aprovechemos en este tiempo la oportunidad para andar el rumbo cristiano, obedecer la voluntad de Dios, cumplir sus mandatos, completar la caminata a la salvación y convertirnos en merecedores de la bendición de alimentarnos del árbol de la vida.
OREMOS:
Padre Querido, es interesante la enseñanza que hoy nos das, gracias por revelarnos la importancia de cumplir el proceso de la caminata cristiana para hacernos merecedores de la oportunidad de alimentarnos del árbol de la vida. Apóyanos siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén.