Lamentaciones 3:21 ¨Pero algo más me viene a la memoria, lo cual me llena de esperanza:¨
Amados, comencemos este día con un ánimo bueno, un ánimo bendecido, poderoso, y, arrasador, cuando andamos de buen ánimo, cosas buenas ocurren, y, nuestro cuerpo, grita en silencio, ¨Estoy Bien¨. Compartamos este material, y, ayudemos a nuestro prójimo, brindándoles un ejemplo de buena conducta, ajustada al cumplimiento de la voluntad de Dios.
Hoy y siempre tenemos el poder de pensar en cosas buenas, e, inundar nuestra mente de bonitos mensajes, como las promesas de Dios, y, actuar conforme a ellos, así podremos ser más felices, y, actuar mejor. No tiene sentido vivir sin esperanza, ella es el combustible de la vida, es ella quien nos mueve, para realizar nuestras actividades del día a día, es en la esperanza de tener éxito, ganancias, lecciones, victorias, alegrías, y, realizaciones, quien comienza algunos estudios, empieza en la esperanza de formarse, ser un buen profesional, y seguir adelante cumpliendo sus sueños, la esperanza nos ayuda mucho, es imposible vivir sin esperanza, la esperanza es la fuerza consiente e inconsciente, que está presente siempre en nuestras decisiones, y, pensamientos, la biblia es un libro de esperanza, leer sus páginas es probar la esencia de la verdadera esperanza, para nuestros días y nuestro futuro, eso es bueno demás, si requerimos de paz, seguridad, de días felices, llenos de esperanza, leamos la palabra del Señor, veamos el texto de la palabra de la palabra de hoy, el cual nos indica que el autor deseaba traer a su memoria, lo que le traía esperanza. Todo esto tenía la finalidad de hacerle bien, motivarlo para avanzar, y, tener una mejor calidad de vida, así poder servir de manera correcta, hagamos eso nosotros también, vamos a pensar en cosas buenas, que nos den esperanza, y, que nos lleven a progresar, esa es la voluntad de Dios.
OREMOS:
Padre amado, traer cosas buenas a nuestra mente es fundamental para cumplir tu voluntad, permítenos proceder de manera correcta. Y pruébanos paras mejorar nuestras capacidades. Peticiones que hacemos en nombre de Jesús.
Amen.