Juan 6:9 “Y Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos?. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, ser firmes en el camino de Dios, es la mejor forma de demostrar nuestra fidelidad, habrán personas que griten bien fuerte cosas que no somos, eso no tiene importancia, porque ya Dios dicto que somos sus hijos fieles, que siempre obedecemos su palabra, y lo colocamos a el en el lugar que le corresponde, que es el primer lugar de nuestras vidas. Compartamos este mensaje, pues lo más lindo va a acontecer, tengamos fe en que la bendición se aproxima a nuestras vidas, por tanto mantengamos comunión con Dios.
Cuando Jesús caminaba en esta tierra, el reunió a muchas personas, la biblia dice que algunas multitudes acompañaban a Cristo, y ellos estaban siguiendo a Jesús, ocurre que cierta vez, se quedó esa multitud tanto tiempo con Jesús que les dio hambre y era un lugar apartado, aunque allí hubiese algún tipo de comercio y algunos pescadores, en el medio de la multitud Dios escogió un niño, este niño fue llevado hasta Jesús pues lo poco que el tenia para Cristo era suficiente. Lo que dice el versículo que encabeza este texto, fue expresado por uno de los Apóstoles de Jesús, entonces Jesús mando a sentarse a todos los presentes, y aconteció el milagro de la multiplicación de los panes y de los peces, asi que la comida fue suficiente para alimentar a toda la multitud, y aun así sobro bastante comida. Es posible que hoy nos sintamos que no somos capaces, que somos inútiles o insuficientes, pero sepamos que hoy Jesús nos levanta y dice que lo que tenemos es suficiente, para realizar la misión encomendada. En este versículo e historia, el muchacho de la historia no está en la misma por casualidad, el pasaba por allí para demostrar que de lo más improbable Dios hace maravillas, sin medidas, pero es muy difícil constatar que muchas veces en nuestras vidas, tenemos dificultades y nos acordamos de lo que deberíamos olvidar, y nos olvidamos de lo que deberíamos acordarnos, muchas veces en los tiempos difíciles nos olvidamos de las bendiciones de Dios, y quedamos llenos de miedo, pero esta historia bíblica quiere decirnos que ante los problemas nos desesperamos porque ignoramos el cuidado de Dios, en esas situaciones difíciles que ya vivimos en el pasado, al respecto el Salmo 37:25, expresa: ¨ Joven fui, y he envejecido, Y no he visto justo desamparado, Ni su descendencia que mendigue pan. ¨, y esto dicho por David, acontece porque Dios es fiel para con aquellos que le son fieles, recordemos que lo poco con Dios es mucho, siempre demos lo mejor y confiemos en el cuidado de Dios, porque los ojos del Señor están mirando a sus hijos e hijas, que son sinceros en su presencia.
OREMOS:
Padre querido, te alabamos por el milagro de la multiplicación de los panes y peces, que ocurrió en el pasado distante, pero te alabamos también porque sabemos que aún hoy, te ocupas de todos aquellos que con sinceridad buscan andar en tus caminos. Podemos no enriquecer, pero nos has prometido que no faltara pan sobre nuestras mesas, si fuéramos fieles a ti, ayúdanos a vivir en fidelidad, y a cumplir tu voluntad en todo momento. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.