Juan 15:8 ¨En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.¨
Amados, gracias a Dios que tenemos hoy la oportunidad de seguir aprendiendo sobre la palabra Bíblica, porque Dios la creo, precisamente para darnos fortaleza en nuestras vidas, entonces valoremos esto, y guardemos los mandatos de esta carta de amor, en nuestros corazones, utilicémoslos para dar un buen ejemplo sobre la obediencia a la voluntad de Dios. Difundamos este mensaje a todo nuestro prójimo, para dirigirlo a los caminos de salvación.
Estas palabras de Cristo, fueron dichas en el contexto de que Jesús se presenta como la vid verdadera, y él dice que nosotros sus discípulos somos como ramos, que estamos conectados a esa vid, como si él es el tronco y nosotros los ramos, y, dice Jesús en el capítulo 15 de este mismo libro, que el siendo la vid verdadera, el Padre es el labrador, y sigue diciendo en esto es glorificado mi padre, el labrador celestial, que acompaña todo el proceso, el dice que ¨Ën esto es glorificado mi Padre, que ustedes den mucho fruto¨, es asi porque la alegría de un labrador, de un agricultor, es ver los frutos de su plantación, asi lo revelas el versículo, que esa será la muestra de que somos sus discípulos, notemos que la escencia del discipulado, es la permanencia en Cristo, pero la prueba del discipulado, es que demos mucho fruto, es una experiencia de permanencia, de comunión, de relación con Cristo, que inevitablemente nos lleva a una nueva vida, hay una conducta digna, un comportamiento ejemplar, un buen comportamiento, pero todo comienza por la relación, por la permanencia en Cristo, en palabras de Pablo, es la fe, que produce buenas obras, no son las buenas obras, lo que conduce a la fe, sino la genuina fe, que tiene como efecto las buenas obras que afectan la vida del Cristiano. Explica el versículo, Efesios 2:10, ¨Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.¨, donde Pablo dice que somos creación de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, , de esa manera los buenos frutos forman parte de la experiencia Cristiana, no son la esencia de la experiencia, pero son el resultado, de la comunión con el Señor, Dios nos bendiga, y, estemos permanentes en Cristo, así seremos fructíferos, hagamos buenas obras, eso alegra al labrador celestial, Dios se alegra cuando ve a su iglesia fructificando.
OREMOS:
Padre amado, estamos aquí con nuestros corazones agradecidos, porque podemos estar conectados a ti, por medio del Señor Jesucristo, y es bueno saber que como fruto de esa conexión, nuestra vida es transformada, y buenas obras aparecen, frutos abundantes como resultado, alabamos tu nombre, santifícanos en la verdad. Peticiones que hacemos en nombre de Jesús.
Amen.