Proverbios 22:1 ¨De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, Y la buena fama más que la plata y el oro.¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz día, tengamos presentes que somos importantes y especiales para Dios, precisamos quedarnos en obediencia a su voluntad, para quedar bendecidos, entonces vamos a buscarlo cada día, como lo estamos haciendo ahora mismo. Difundamos este mensaje.
Posiblemente a muchos nos gustaría influenciar o persuadir a las personas, así no seamos líderes de una empresa o vendedores, la influencia hace parte de nuestras vidas, todos nosotros influenciamos y somos influenciados, demos una buena influencia, especialmente si tenemos algo positivo para transmitir, la influencia ocurre desde el primer momento que entramos en contacto con alguien, según los expertos tenemos pocos segundo para causar una buena impresión, esa primera imagen, seria grabada en la mente y utilizada como patrón para juzgar, a la persona más tarde, antes de decir cualquier palabra estamos siendo evaluados por nuestro lenguaje corporal, por la expresión de nuestras caras, el aspecto no verbal representa el 60% del impacto de la comunicación, entre las cosas que ayudan a mejorar las interacciones de influencia están el interés sincero por los otros, la integridad personal, la capacidad de sorprender positivamente, la iniciativa de ofrecer más de lo que fue prometido, también hablar con tonalidad agradable, contar una historia personal, no masacrar a otros con demasiada información, y tener una buena reputación, de nada sirve tener dinero o es escasamente útil cuando nuestro comportamiento es equivocado, cuando nuestras expresiones son pobres, cuando influimos de manera negativa, y en lugar de aportar a la sociedad, solo la empeoramos, muchas veces muchas personas por andar haciendo cosas erradas, no son apreciados ni queridos o admirados por su familia, entonces, cuidemos nuestras formas de proceder y mejoremos cada día en ese sentido, sigamos el consejo bíblico.
OREMOS:
Padre Amado, la iluminación que nos otorgas con tu palabra, es increíble y contribuye a que tengamos una mejor vida, llénanos de sabiduría para ser instrumentos de tu obra. Apóyanos siempre. Peticiones que te hacemos en nombre de Jesucristo.
Amen.