Isaías 6:1-3 “En el año que murió el rey Uzías vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y sus faldas llenaban el templo. “ – “Por encima de él había serafines; cada uno tenía seis alas; con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies, y con dos volaban. “- “Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, por la misericordia del Padre Celestial es que estamos aquí, esta es una de las razones por la cual agradecer y escuchar la instrucción de su palabra, la cual busca orientarnos para que tengamos una mejor vida y un buen caminar por el rumbo a la salvación. Compartamos este material con nuestro prójimo, que tanto requiere de una palabra esperanzadora.
El profeta Isaias es conocido como uno de los grandes profetas de Israel, el es conocido por su llamado, cuando el tuvo la oportunidad de contemplar el trono de Dios y los santos ángeles en una gran visión. Fue un gran privilegio el que tuvo Isaías en tener esa visión, la biblia dice que Isaias actuo con humildad reconociendo su condición de pecador ante el rey del universo, por eso el dijo: ¨¿Quién soy yo?, ¡Ay de mi!, estoy perdido, yo soy hombre de labios impuros y habito en un pueblo de impuros labios y mis ojos vieron al Señor de los Ejercitos¨, pero en respuesta a la actitud humilde del profeta, un ángel se retiro con la brasa viva del altar y con la con aquella brasa el toco mi boca dijo Isaías y me dijo así: ¨ Es que como ella toco tus labios, tu inequidad fue quitada, y tu pecado perdonado ¨, Isaías reconoció la grandeza y la majestad de Dios, él se humillo en la presencia del Señor y reconoció su condición de pecador, como consecuencia él fue visitado por la gracia y misericordia de Dios, recibiendo la garantía de que sus pecados estaban perdonados, delante de esa gracia recibida Isaías tuvo condiciones de responder a la invitación de Dios, si leemos el capitulo en determinado momento Dios pregunto ¿A quien enviar?, entonces Isaias se ofrecio a ir, observemos que Isaias vio la gloria de Dios, luego reconocio la indignidad propia, y cuando confeso su pecado, Isaias experimento la gracia del Señor, y enseguida acepto el llamado para servir a Dios, que nosotros delante de la majestad del Señor confesemos nuestras debilidades, y las carencias, y asi recibamos la gracia del perdón, y el privilegio de vivir cumpliendo la misión de Dios, Dios quiere usarnos en este dia, hagamos como hizo Isaias, y digamos: ¨Señor aquí estamos, envianos¨.
OREMOS:
Padre querido, te alabamos porque llamas a pecadores, porque perdonas nuestros pecados y nos otorgas la oportunidad de poder servirte de la mejor manera posible para que podamos alcanzar tus dadivas. Contribuye con nosotros. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.