01 de Diciembre: Educar para la Eternidad

Proverbios 22:6 “Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él. “

 

 

 

Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, confiemos en que esta práctica diaria de meditación y estudio bíblico, nos está preparando para recibir bendiciones, nos está capacitando para valorar y apreciar la bondad de un Padre que desde lo lejos nos guía, pero que a la hora de que intentamos proceder nos acompaña, colaborando con nosotros en lo necesario. Sigamos aportando y compartiendo en la obra de Dios, estos mensajes nos son dados para bendecirnos y bendecir, hagamos nuestra parte, distribuyamos el mensaje a nuestro prójimo.

 

 

Educar hijos para la eternidad, educarlos para que se convierta en personas bien comportadas, o ciudadanos honrados en este mundo, sino educar hijos para el reino de Dios por la eternidad, eso es un placentero desafío, muchos piensan que educamos a los hijos solo cuando les damos comida, ropa, escuela, juguetes. Pero eso es parte de nuestra obligación, educación es enseñar al individuo a tener dominio propio, respetar a los otros, ser una persona bondadosa, paciente, compartir lo que tiene con el prójimo, enseñar que el mayor propósito de la vida es amar y servir a Dios, y a nuestro prójimo. Actualmente, los niños se convirtieron en el centro de la vida del hogar, el lugar de seguir la rutina de los padres y la familia, eso es grave porque deberían seguir la rutina de los padres, lo perjudicial de eso es que muchas veces los niños crecen como que si fueran estrellas para la vida. Entonces, quien educa a los niños en el camino de Dios, hace un buen trabajo porque ellos nunca se separaran de Dios. Lo cual significa que la enseñanza comienza con la biblia formando individuos sabios para la salvación. La primera iglesia de nuestros hijos, debe ser la casa. La palabra de Dios enseña que entrenar a los hijos para conocer y obedecer al Señor, es la base para la educación para la eternidad, hay que aprovechar las oportunidades para llevar a los niños a conocer sobre Dios, llevemos a nuestros hijos a estar en el centro de la voluntad de Dios, y veremos que sus vidas van a producir frutos de justicia, los padres que les dan todo a sus hijos los están desequilibrando para vivir. Que Dios tenga misericordia de nosotros, que nos de sabiduría para educar a nuestros hijos, encima de todo en el camino del Señor, porque la mayor herencia que podemos dejar a nuestros hijos no está relacionada a cosas materiales, porque las cosas materiales son disipadas con facilidad, la mejor enseñanza es orientar en la dirección correcta hacia el cumplimiento de la voluntad de Dios.

 

 

OREMOS:

 

Padre querido, Estamos en tus manos, te pudo por todos los que oran en este momento representando a sus familias, bendícenos, pues queremos seguir cumpliendo tu voluntad. Apóyanos siempre. Son nuestras peticiones en nombre de Jesucristo.

 

Amen.

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