Génesis 19:30 “Pero Lot subió de Zoar y moró en el monte, y sus dos hijas con él; porque tuvo miedo de quedarse en Zoar, y habitó en una cueva él y sus dos hijas.”
Padre nuestro, que tu gracia y tu paz nos alcance en todo momento, agradecidos estamos por este maravilloso día, la oportunidad especial de compartir tu palabra bendita siempre es valorada por nosotros, deseamos agradarte mediante alabanzas considerando este texto como símbolo para tu glorificación, instrumento con el cual se pretende contribuir a la evangelización de tu pueblo.
Amados, que la paz del Señor esté con todos y seamos siempre bendecidos. El verso de la ministración de hoy relata una de las historias más lindas del libro de Génesis y la biblia entera, es la historia del libramiento de Lot y su familia de las tierras de Sodoma. Este personaje, tenía diversos intereses en esta ciudad, pero cuando se determinó que iba a ser destruida, los ángeles lo tomaron de los brazos, y le dijeron a él y a sus familiares, que vieran al frente porque iban a otro lugar, pero la esposa de Lot dió una mirada hacia atrás y fue convertida en estatua de sal. Ahora bien, actualmente las personas están materializadas, les cuesta desprenderse de un bien, se piensa en general que el valor de las personas está determinado por la cantidad de cosas que posean. En este sentido, la sociedad tiene una mentalidad basada en intereses pecuniarios, ello aleja al ser humano de Dios,. Debemos tener presente que la obediencia es la base de la relación con Dios. Atendiendo a ello, debemos mostrar amor por el prójimo, sin discriminación y dando el valor que a cada quien le corresponde desde el punto de vista espiritual, porque todos somos hijos de Dios y estamos llamados a convidar a nuestros semejantes a vivir este status.
OREMOS:
Padre amado, gracias por las bendiciones que nos otorgas y las que nos seguirás otorgando, gracias especialmente por habernos orientado respecto a los planes que tienes para nosotros, permanece guiándonos siempre, queremos hacer tu voluntad. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amén.