2 Timoteo 2:24 ¨ Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido;¨
Dios Adorado, hoy venimos ante ti, llenos de alegría por tener el placer de compartir tu palabra bíblica que es alimento que nutre nuestras almas y produce cambios significativos en nuestros corazones, hacemos este estudio como símbolo de alabanza para tu glorificación, bendice este material para que cumpla el objetivo evangelizador, y perfeccione la conducta de tus servidores.
Amados, tengamos paciencia en que los resultados esperados se producirán en el tiempo previsto por Dios, solo mantengamos obediencia a los mandatos bíblicos y llegaremos a recibir las dadivas que nuestro padre nos tiene reservadas. En el versículo de hoy, se nos considera a todos los cristianos como siervos del Señor, y como tales no debemos andar en contención, conflicto o ser problemáticos, sino mas bien ser simples, distribuidores del amor que nuestro padre nos otorga, pacientes, calmados, generadores de actos de bondad, proactivos en la búsqueda del bien común y dispuestos a compartir el conocimiento de la verdad, sin embargo, existen personas que se autodenominan cristianos e incumplen en grandes partes el mandato de Dios, individuos que aman al pecado y la mentira, personas que gozan de causar mal a otros o quieren adaptar a su conveniencia los mandatos del padre celestial, ellos dicen ser cristianos también, sin embargo ignoran que están actuando de una forma contraria a los principios que Diosa estableció para que tuviéremos una vida en santidad. Por esta razón, requerimos convertirnos además en entes contralores de nuestras conductas para agradar a Dios, predicar con el ejemplo y actuar de manera apropiada, refrenar ese deseo de juzgar o condenar a otros por sus posibles acciones contrarias al mandato de Dios, utilizar la disciplina eclesiástica, la cual explicamos en entradas anteriores de este sitio, y ser coherentes entre nuestras acciones y lo que predicamos.
OREMOS:
Dios bondadoso, colocamos nuestras vidas en tus manos, dirige nuestros pasos y llévanos a caminar siempre en victoria, permítenos continuamente afinar nuestras cualidades para servirte de la mejor manera posible, ayúdanos a predicar mediante el buen ejemplo. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen
INTERACTUEMOS:
Teniendo conocimiento de la enseñanza expresada en la Biblia sobre el punto en cuestión, cuéntenos lo siguiente:
¿Qué beneficio le trae aplicar esta palabra a su vida?
¿Cree que este conocimiento pudiera contribuir a mejorar sus andanzas por el camino de Dios?
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