Lucas 11:28 ¨ Y él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan.¨
Amados, precisamos buscar cada día a de Jesús, pues él es el único camino que nos conducirá a Dios, y nuestro Padre Celestial, se agrada al notar que estamos cumpliendo su voluntad. Es placentero estar reunidos en este momento especial para meditar en la palabra de Dios, compartamos este material para bendecir a nuestro prójimo.
Es poco común e inimaginable que alguien llegue de un funeral diciendo: «Estuvo bueno el evento», debido a que los funerales son siempre tristes, porque en el ambiente de tristeza algunas personas revelan desespero, las escrituras sagradas registran el caso de ese funeral, que comenzó mal pero termino bien, y muy bien. En la continuación de la historia Jesús resucito al joven que estaba muerto, al inicio el funeral empezó por llanto y lamentaciones, especialmente por la madre viuda que había perdido a su único hijo, eso era muy triste, y no hay nada más doloroso que perder a un hijo, la viuda y madre estaba desesperada, ya era segunda vez que pasaba por aquella experiencia dolorosa, años antes sepulto al marido y fue con gran sacrificio que crio al hijo, era su única esperanza de días mejores, pero ahora el se fue también, ¿quién proveerá su sustento?, al ver a aquella madre sufriendo Jesús se compadeció de ella y le dijo «hija no llores», esas eran palabras extrañas en aquella ocasión, normalmente se dice que el llanto alivia, que el llanto ayuda en el proceso de cura y restauración, pero Jesús le dijo que no llorara porque el sabía lo que haría, en medio del silencio se escuchó la voz de Cristo diciendo «Joven yo te dogo: levántate», y el muerto abrió los ojos y se levantó, las lágrimas de aflicción se convirtieron en lágrimas de alegría y gratitud, ese fue un bello funeral que comenzó con llanto y termino con risas, y así será cuando Cristo vuelva, los que duermen en Cristo se levantaran de la sepultura, por el poder de Dios con cuerpo muevo, y ellos abrazaran a sus seres queridos también salvos en ese día renovemos la esperanza en el Señor para un lindo reencuentro con sus amados, que descansan en Cristo, quizá en nuestros corazones hayamos sentido tristeza, porque una persona amada falleció, pero Jesús nos dice que estemos tranquilos porque el esta con nosotros y un día tendremos la esperanza de reencontrarnos con nuestros filiares que descansan en el Señor, porque vivió con el Señor.
OREMOS
Señor es bueno conocer tu palabra, creer en ella y practicarla, saber que ni la muerte puede separarnos de ti porque un día, todos tus hijos te reencontraran en mejores circunstancias. Ayúdanos siempre. Así pedimos en nombre de Jesucristo.
Amén