Jeremías 9:23-24 ¨ Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas.¨ – ¨ Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.¨
Amados, precisamos buscar cada día a de Jesús, pues él es el único camino que nos conducirá a Dios, y nuestro Padre Celestial, se agrada al notar que estamos cumpliendo su voluntad. Es agradable meditar este tiempo en la palabra de Dios, pues ello nos permite sentir su amor en forma de guías para conducirnos mejor, operar conforme a su voluntad y continuar agradándole con nuestros procederes. Llevemos este material a otras personas a fin de bendecir al prójimo.
Aunque ya conozcamos todos los libros de todas las bibliotecas a nivel mundial, y nos sepamos todas las enciclopedias existentes, si nosotros no conocemos al Señor, nuestro conocimiento será en vano, aunque tengamos la capacidad de localizar hechos y reunir informaciones, hasta encontrar respuestas como google, si no encontramos al Señor, no pasaremos de una simple herramienta de conocimiento digital, aunque nos aventuremos por todos los dominios del conocimiento como la filosofía, sociología o antropología, y otros mas, si no nos aventuramos a conocer al Señor no pasaremos de simple herramienta de aventureros deslumbrados, es por eso que el profeta dice el contenido del texto bíblico en estudio, destacando que justicia y misericordia son la base del gobierno de Dios, y cuando conocemos a Dios por experiencia, cuando convivimos con Dios por la fe, entonces esas características del Señor pasan a ser desarrolladas en nosotros, y nos convertimos en personas justas y misericordiosas, pasando a ser las personas más justas, sabias, y más fuertes de este mundo. Quien tiene el conocimiento de Dios desarrolla por el conocimiento de la experiencia con Dios, justicia y misericordia, que son características del carácter de Dios, desarrolladas en nosotros, esto es fabuloso, fantástico, así si conocemos a Dios nos convertiremos en personas ricas, sabias y fuertes de este mundo. Quien tiene a Dios lo tiene todo, así no tenga nada.
OREMOS
Padre Adorado, venimos hoy a ti llenos de la alegría y felicidad que nos das al hacernos saber y sentir que somos importantes y especiales para ti, queremos conocerte un poco más cada día y desarrollar grandes cualidades, para cumplir tu voluntad. Ayúdanos siempre. Así pedimos en nombre de Jesucristo.
Amén.