Juan 10:14-15 ¨ Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, ¨ – ¨ así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. ¨
La paz del Señor sea con todos. Todos somos especiales para Dios, él nos ama y en silencio opera para nuestro bienestar, es un placer estar reunidos para meditar en la palabra de Dios, es una buena costumbre buscar cada mañana el crecimiento espiritual , la guía de Dios, para tener mejores reacciones a lo largo del día y en nuestras vidas en general. Compartamos este mensaje, nuestro prójimo lo requiere.
En este texto, Cristo se presenta como el buen pastor, aquellos que creen en su nombre serían sus ovejas, Cristo no dice que el es apenas un pastor, el es un buen pastor, en contraste con los ladrones y los bandidos, que solo venían a matar, robar y destruir, el rebaño, Jesús se presenta como un buen pastor en el texto de hoy, y este no es solamente aquel que cuida de las ovejas, el buen pastor no es aquel que providencia el alimento, aquel que da agua, pero es aquel que da la vida, él que da la vida por sus ovejas, es por eso que el dice en Juan 10:10 ¨ El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. ¨. La vida en abundancia, es más que vida física o biológica, la vida en abundancia es una vida llena de amor a Dios, vida en abundancia es una vida llena de paz, de alegría, llena de satisfacción y felicidad, esto es vida en abundancia y es lo que Dios desea para nosotros, es la vida eterna, y esta vida eterna, es la vida que el pastor quiere darle a sus ovejas. Jesús se presenta como buen pastor y el autor de nuestras vidas, él es aquel que puede dar y nadie puede quitar, nadie puede matar al autor de la vida, de acuerdo al versículo dieciocho, él espontáneamente dio su vida, él dio su vida para darnos vida eterna, y esa entrega otorga vida a todos los que en él creen, por eso Jesús es retratado como el buen pastor, él dio su vida, para que nosotros tuviésemos vida, y vida en abundancia. Vamos a agradecer a Jesús por ser nuestro buen pastor.
OREMOS:
Padre querido, te agradecemos por el sacrificio que Jesús hizo en la Cruz, gracias porque él es nuestro buen pastor y nos otorga vida en abundancia. Ayúdanos siempre. Son las peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén.