La Paz del Dios sea con ustedes. Así saludaba Jesús, y así vamos a saludarnos aquí, para que esta frase sea un recordatorio de que precisamos realizar con calma y paz, todos nuestros actos para glorificar a Dios de alguna manera, para que podamos aplicar con tranquilidad el amor en nuestras interacciones para así cumplir parte de la voluntad de Dios. Además, para que estemos atentos a la enseñanza de nuestro Salvador, contenida en: Mateo 6:33.
Enfocaremos nuestra reflexión de hoy en el versículo: Marcos 6:37
¨ Respondiendo él, les dijo: Dadles vosotros de comer. Ellos le dijeron: ¿Que vayamos y compremos pan por doscientos denarios, y les demos de comer? ¨
Seguramente ya nos haya ocurrido que en ocasiones, por diversas causas, la duda, la incerteza, la frustración u otras influencias negativas nos dominan, e intentan perturbar y hasta desviarnos de los caminos de salvación, en esos momentos tengamos calma, quedemos sin reacción por algún tiempo, pues en esos momentos, estamos siendo atacados por el enemigo, allí el movimiento a realizar es orar, orar para obtener la guía del Señor y lograr vencer. En la oportunidad en que Jesús realizo el milagro de la multiplicación de panes y peces, el hecho que motivo a que ese milagro fuera realizado fue que estaba reunida una multitud, escuchando las enseñanzas del maestro de galilea, se había hecho tarde y las personas tenían hambre, entonces se planeó solucionar esa situación comprando comida pero al conocer que no habían suficientes recursos económicos y los alimentos eran escasos, Jesús decidió multiplicar esos peces y panes para que alcanzara para todos los presentes. Así Jesús convirtió en abundancia aquella escases de recursos en abundancia, todos saciaron el hambre, además de quedar sorprendidos por el milagro. Eso nos revela que con Jesús, lo poco se convierte en mucho. Ese mismo Jesús que hizo el milagro de la multiplicación, hoy está con nosotros y va a multiplicar cosas positivas y bendiciones en nuestras vidas. Hoy día, la situación esta compleja, escasean los recursos y las necesidades son ilimitadas, pero permanezcamos con Jesús, están junto a él, lo poco se transformará en mucho, porque estaremos con Dios.
OREMOS:
Padre Celestial, llenos de gozo venimos a ti en esta hora, para pedirte que siempre estés con nosotros, que crees las condiciones para que podamos seguir la enseñanza de Jesús y llegar a ti, queremos cumplir tu voluntad. Apóyanos. Así pedimos en nombre de Jesús.
Amén