Juan 5:24 “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, es un placer estar reunidos otra vez junto a la palabra de Dios, cuando abrimos la Biblia y la leemos es como si estuviéremos levantando el teléfono para atender la hermosa llamada de nuestro Padre Celestial, quien quiere lo mejor para nosotros y por eso nos aconseja el rumbo a seguir con el mayor amor posible. Agradándose a su vez de que mostremos obediencia a sus mandatos y tengamos una bonita vida. Esa es una buena forma de glorificar a Dios.
Estas poderosas palabras fueron dichas por el Señor Jesús, con estas palabras Jesús nos dice que sin ninguna duda, quien oye su palabra y cree en aquel que le envió, tiene la vida eterna, observemos que Jesús no dice ¨Tendrá la vida eterna¨, él dice ¨Tiene¨ porque la vida eterna está garantizada para quienes oímos la palabra del Señor, si creemos en el Señor, quien oye su voz y cree en quien le envió tiene la vida eterna, no entra en juicio, ni en condena, pero paso de la muerte para la vida, Jesús no dice ¨PASARA DE LA MUERTE PARA LA VIDA¨, él dice que paso, porque eso está garantizado con el hecho de creer, creamos en el Señor de todo corazón, seamos sus hijos fieles y cercanos, por eso ya hemos pasado de la muerte para la vida, eso no significa que no moriremos físicamente, seguramente si lo hagamos pero esa muerte no será nuestro fin, porque ni la muerte nos separa del amor de Dios que está en Cristo nuestro Señor, cuando Jesús dice que pasamos de la muerte para la vida en el sentido de que pasamos de la condenación para la salvación, es porque hemos oído y creído en su palabra. No estamos más en condena sino que estamos salvos en Jesucristo, permanezcamos en el para seguir salvos, hasta el día en que juntos estaremos por siempre con nuestro Señor.
OREMOS:
Padre querido, queremos agradecerte delante de tanta bendición y por el hecho de hacernos saber de que creyendo en ti, escuchando y atendiendo a tu palabra en completa obediencia, nosotros garantizamos la vida eterna, la plena salvación.. Ayúdanos siempre. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.