Marcos 12:43 ¨ Entonces llamando a sus discípulos, les dijo: De cierto os digo que esta viuda pobre echó más que todos los que han echado en el arca; ¨
La paz de Dios sea con todos. Es un placer estar reunidos en este momento, para meditar en la palabra de Dios, disfrutemos de este material y como es importante en nuestras vidas compartámoslo con nuestro prójimo por todos los medios posibles, recordando que siempre debemos dar un ejemplo agradable, un ejemplo que manifieste la presencia de Dios en nuestras vidas. Recordemos la enseñanza que Jesús nos dejó en Mateo 6:33.
Jesús estaba en el templo y observaba la escena, un hombre rico tras otro hacia su oferta y después de depositar su oferta, ellos quedaban parados frente al baúl de las ofertas, a ellos les gustaba ser vistos y que sus acciones fueran apreciadas, pero luego llego una viuda pobre, ella coloco algunas monedas como dice el texto bíblico, que correspondían aproximadamente a 2% del salario diario de un trabajador, un denario, que era la moneda de cobre judía más pequeña, de las que circulaban en aquel tiempo. Cristo elogio la oferta de ella, dijo que la viuda dio más que todos los ricos que la antecedieron, porque a los ojos del cielo, no es la cuantía o el tamaño de la oferta, lo que importa es el motivo que la mueve, y esto es lo que es tomado en cuenta a la hora de ser valorados nuestros aportes a la obra de salvación. Siempre que procedamos teniendo como objetivo el cumplimiento a los mandatos de Dios, nuestra contribución pequeña será tomada como una contribución grande porque los motivos que nos han movido a realizarla, son grandes. Desde siempre las personas en sociedad han estado precisando de un reconocimiento que los motive a continuar comportándose se ciertas maneras, allí se fundamenta la necesidad de elogiar, ello nos beneficiara y cuesta poco, además agradará a nuestro prójimo, vamos a practicar el elogio desde ya, es preciosa esa cualidad para motivar a los demás.
OREMOS:
Padre Celestial, gracias por las hermosas maneras en las que te manifiestas en nuestras vidas, nos agradamos al conocer que consideras los motivos de nuestras acciones, permítenos elogiar las buenas actitudes de muestro prójimo, para motivarlos a mejorar. Apóyanos siempre. Peticiones que te hacemos en nombre de Jesucristo.
Amén.