Juan 20:1 ¨El primer día de la semana, María Magdalena fue de mañana, siendo aún oscuro, al sepulcro; y vio quitada la piedra del sepulcro.¨
Padre nuestro, que tu gracia y tu paz nos alcance en todo momento, agradecidos estamos por este maravilloso día, la oportunidad especial de compartir tu palabra bendita siempre es valorada por nosotros, deseamos agradarte mediante alabanzas considerando este texto como símbolo para tu glorificación, instrumento con el cual se pretende contribuir a la evangelización de tu pueblo.
Amados, que la paz del señor este con todos y seamos siempre bendecidos. Maria Magdalena fue la primera en ver al cristo resucitado, al llegar al lugar y ver que la piedra fue retirada corrio hacia donde estaban los demás disvipulos paa avisarles y estos retornaron a Jerusalem pero ella permanecio contemplando la sepultura vacia, de pronto escucho una voz conocia que le pregunto: <Mujer,¿por que lloras? > en eso Maria con los ojos llenos de lagrimas vio la figura de un hombre, ella penso que era el jardinero, por este motivo le dijo: <Señor, ,¿Donde esta el cuerpo? >, en ese momento al percibir que era Jesus ella se seco las lagrimas y se dirigio a abrazarlo, pero Jesus le dijo: <No me toques que aun no he subido con mi padre, anda a donde tus hermanos y dile que resucite, que estoy llendo hacia la casa de mi padre, nuestro Dios>. Ahora, vamos a tomar este momento y pensemos en que quiza nuestras lagrimas o nuestra depresion infundada nos esten impidiendo ver que a nuerstro lado se encuentra Jesus y que sin dudas nos apoya, que si obedecemos sus lecciones nos va a ayudar a obtener la victoria, para tener mejor calidad de vida. Probablemente las nubes negras de nuestros problemas esten impidiendonos ver que no debemos temer, porque si somos obedientes, ese Dios que esta con nosotros nos dará la victoria. Lo importante es que si tenemos fe, no nos podemos dejar doblegar por las adversidades, el pecado o cosas malas, siempre debemos seguir adelante, siendo obedientes al mandato divino para que asi logremos grandes victorias y a la vez mostrar nuestra cualidad de cristianos genuinos, autenticos hijos de Dios.
OREMOS:
Padre amado, tu nos aportas tantas bendiciones y por ello estamos agradecidos ampliamente contigo, pero especialmente por otorgarnos la oportunidad de seguir mejorando constantemente para tener una personalidad semejante a la de Jesus, ayudanos a salir adelante pese a las adversidades, a que nuestras lagrimas no nublen nuestra vision hacia ti. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen