Marcos 8:36 ¨ Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?¨
Hoy señor nuestro, hacemos este aporte a tu obra, compartiendo este devocional a través de las redes sociales, un lugar absolutamente mundano, para hacer un uso adecuado de este medio de comunicación, llevar el bien y despertar al prójimo para que obtenga la sabiduría necesaria para fomentar las buenas conductas, enseñar desde tu amor, reconocer el mal y apartarse de el. Bendice este texto para que sea de provecho para todos los lectores, sea compartido para llegar a mas lugares y personas, consiguiendo que este mensaje de esperanza traiga mas almas a tus caminos y cumpla el objetivo evangelizador previsto en tu palabra.
Amados, como consecuencia de que la maldad ya ha sido bastante difundida, la fe en nuestro señor y el amor al prójimo de algunos decaerá, ya como hemos sido alertados de esta situación debemos de mantener la perseverancia en los caminos de salvación, trabajando en fortalecer nuestra fe, esparciendo el amor con el cual somos dotados cada día para que seamos reflejos de bendición para el prójimo, así se notara la obra de Dios en nuestras vidas. En el versículo de hoy, se nos orienta a que debemos realizar las actividades de la vida con tranquilidad, buscando hacer el bien, interactuar correctamente, que nuestras palabras sean precisas y constructivas, con equilibrio, que busquemos edificar en lugar de destruir, pues la vida es corta y seria inapropiado vivir con fantasmas del pasado atormentándonos a causa de un mal actuar. En el mundo hay cuestiones como dinero, poder, fama, algunos se obsesionan con ellas y dejan de lado a las cosas importantes como la familia, cuidar su salud, descansar, ser felices, sentir el placer de ayudar a otros, honrar el nombre de nuestro Dios. Pierden muchas cosas a causa de su fijación por obtener mas placeres del mundo, y ello los lleva a la perdición. Es mejor buscar de Dios, vivir obedientemente a sus mandatos para tener un equilibrio en las áreas de nuestras vidas, actuando con esta sujeción al padre seguramente nos ira bien, así que confiemos en él, porque Dios jamás nos ha quedado mal.
OREMOS:
Padre de bondad, ayúdanos a enfocarnos en las cosas y personas correcta, deseamos obtener la salvación que para eternidad nos ofreces, coloca sabiduría en nuestros corazones para decidir adecuadamente apartarnos del mal. Así pedimos, en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.