Juan 21:17 » Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas. «
Señor todopoderoso, agradecemos por permitirnos otra vez compartir tu palabra bendita, indicando aplicaciones a la realidad actual, sobre cada versículo que compone la sagrada biblia, extiende tu gracia y bendición sobre el texto en desarrollo para que cumpla con los fines evangelizadores previstos.
Amados, que la paz del Señor esté con todos y seamos siempre bendecidos. Algunas veces pudimos habernos sentido perdidos, dudando respecto a la fe, dudando sobre si Dios nos perdonaría nuevamente, tambien puede ser que sepamos de casos perdidos entre comillas, segundas y terceras oportunidades no estan disponibles en muchos ambientes, sin embargo Dios actua de manera diferente como lo podemos notar en el caso de Pedro, por iniciativa de él algunos discipulos decidierón ir a pescar en la madrugada, un extraño en la orilla de la playa pregunto si tenian algo para comer, ellos no habian pescado nada durante toda la jornada, pero recibierón la orden de lanzar la red hacia un lado del bote, el lado derecho, la autoridad de la voz no dejó ninguna duda, por tal motivo ellos lanzarón la red en señal de obediencia y agarrarón un gran numero de peces, acostumbrado a no pensar dos veces Pedro se lanzo al mar, y comenzó a nada en direccion a Jesus, con todo el Maestro de Galilea estaba restaurando a su discipulo fallido, atrayendolo para sí otra vez, la prueba era preguntarle a Pedro si amaba a Jesus y se le cuestionó sobre ello tres veces, las dos primeras veces Pedro contesto diciendo: Señor tu sabes todas las cosas, la tercera vez dió una respuesta más debil. Si el amor de Pedro por Cristo no podía ir al mas excelso sentimiento, el amor de Cristo por Pedro era muy grande. Sepamos bien, que si quiza no andamos amando a Cristo como es debido él si nos ama con toda su intensidad y va a ayudarnos en cada momento de nuestra vida, nunca podemos considerarnos ni aceptar que somos casos perdidos, porque para Dios no existe caso perdido y si Pedro alguien que andaba tan cerca de Cristo de él se apartó en algún momento y hasta lo negó, eso quiere decir que hay esperanza para nosotros y todas las veces que vayamos en dirección a Cristo, jamás seremos rechazados.
OREMOS:
Padre Amado, aunque tengamos fallas y caidas, no permitas que permanezcamos lejos de ti, ayúdanos a mantenernos en victoria constante siguiendo obedientemente tus mandatos. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen