Nahúm 1:7 “Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían. “
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Feliz Día, llego la hora, es el momento de nuestro encuentro para estudiar la palabra esperanzadora de un Dios de amor, atendamos con cariño a esta instrucción, nuestro Padre Celestial nos ama y busca perfeccionarnos cada día. Compartamos el mensaje y llevemos a más almas a los caminos de salvación.
Nahúm es uno de los llamados profetas menores, porque escribieron materiales cortos en la biblia, estas palabras que en su libro se escribieron indican que la plenitud y el éxito de la vida humana, consisten en una profunda relación con Dios, creamos en eso porque reconocer a Dios es el primer paso para el cristiano tener el poder, pues todo lo que poseemos lo tenemos no por nuestros méritos propios, sino porque Dios es bueno y su misericordia dura para siempre, pero reconociendo la bondad de Dios el se convierte en nuestra fortaleza en el día de angustia, eso no significa que seremos libres de las tribulaciones, de las dificultades, ni de las tristezas, pero si que recibiremos poder para sobreponernos a todo eso, es el conocimiento de Dios que hace al Señor nuestra fortaleza, nos trae la certeza y la seguridad de que alguien mayor que nosotros está en control de todo, otra parte hermosa del versículo es la parte final que relata que Dios conoce a los que en el se refugian. Dios nos conoce totalmente. Dios se compadece con nosotros, nos ayuda totalmente, por eso se convierte en nuestra fortaleza cuando en el buscamos refugio, existe una bendición para nosotros que viene de la búsqueda de Dios, esa búsqueda hace de Dios nuestra fortaleza y estando en medio de las tragedias, sufrimientos y demás, nosotros conseguimos mirar la bondad de él, la gran obra de Satanás el enemigo de Dios es cegar a los hijos de Dios para que no perciban su bondad y misericordia, para que no percibamos que Dios es bueno, pero cuando lo percibimos él se convierte en nuestro refugio, veamos que si Dios es bueno quiere decir que él quiere nuestro bien, si él es fortaleza eso indica que el puede ayudarnos, y si él nos conoce entonces sabe cómo ayudarnos, él nos cuida a todos, por tanto no requerimos temer a nada, porque todas las cosas cooperan para aquellos que aman a Dios y son llamados según su propósito.
OREMOS:
Padre querido, te alabamos porque eres bueno, te alabamos porque eres nuestro refugio y fortaleza en los tiempos de angustia y tribulación, ayúdanos a sobreponernos a todos los obstáculos para conseguir alcanzar el objetivo que para nosotros has previsto en forma de propósito. Es nuestra oración hoy, que hacemos en nombre de Jesucristo tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen.