Lucas 6:41 ¨ ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?¨
Padre nuestro, gracias por constantemente extendernos tu favor, también por la generosidad de conceder nuestras peticiones y atender a nuestras suplicas que con genuina fe practicamos diariamente. En este momento continuamos esparciendo tu palabra y pedimos que cubras con tu manto protector a todos los que forman parte de este ministerio, generadores de material, compartidores del material, y a todos los que están envueltos de alguna manera en la evangelización
Amados, por allí andan personas listas para juzgar todo lo que alcanzan a notar, esta situación se observa en todo los lugares, incluso en iglesias donde además del juicio irracional, el chisme juega un papel fundamental pero nocivo, estos hechos constituyen conductas que deben seré borradas definitivamente del proceder de un buen cristiano, además de eso las habladurías de este tipo son destructivas para las relaciones humanas, bien expone un autor famoso entre las formas de tratar con las personas ¨No critique, ni condene, ni se queje¨. El versículo que hoy estudiamos, se refiere exactamente a la orientación que Jesús hace a los discípulos, para que en lugar de juzgar y condenar, se fijaren en sus propias debilidades en procura a corregirlas con el objetivo de ganar fortaleza en esa área, debido a que es muy fácil apuntar el error de otro, pero dejamos de evaluar nuestras conductas. Así para demostrar nuestra cualidad de hijos de Dios, requerimos ser coherentes, quebrando con esa cadena de hábitos negativos que manchan nuestro transitar en el camino a la santidad. Acordémonos de hablar en términos constructivos para edificar la fe, motivemos a nuestro prójimo a mejorar, únicamente elogiemos y si necesitamos dar alguna recomendación a alguien utilicemos una comunicación desde el amor en privado.
OREMOS:
Dios Querido, gracias porque tenemos la seguridad de que siempre estas con nosotros y jamás nos abandonaras, permanece siempre a nuestro lado, gracias porque en medio de situaciones difíciles nos llevas de la mano hasta la victoria, ayúdanos a seguir firmes en los caminos del bien. Son nuestras peticiones, que llenos de fe hacemos en esta oportunidad en nombre de tu hijo Jesucristo, en nombre de quien todo lo concedes.
Amen
INTERACTUEMOS:
Amados, en esta oportunidad para hacer efectiva observancia a la dirección que nuestro padre nos indica en esta palabra bendita, invitamos a COMPARTIR una vez más, dando lectura al texto:
El pecado de los Chismes.
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