Juan 15:11 ¨ Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido.¨
Amados, Dios está otorgándonos ahora mismo, otra dosis de la inagotable bendición del gozo, para que estemos felices, y, de buen ánimo, en todo momento, puesto a que nosotros de esa manera demostramos, nuestra plena fe en el Señor, y, colocamos, los eventos de nuestras vidas en sus manos, así progresaremos con certeza, y brindaremos un buen ejemplo al prójimo. Que tanto necesita conocer del mensaje evangelizador.
Este versículo, indica palabras dichas por Jesús, y, nuestro Salvador nos dio esas enseñanzas para que su alegría este en nosotros, y nuestra alegría sea completa. Estas palabras, destruyen completamente el pensamiento que algunas personas tienen, inclusive Cristianos, de que el Cristianismo es una religión de tristeza, la persona consagrada a Cristo, la que se torna seguidor de Cristo, naturalmente pasa a ser una persona triste, porque es inconformista con los problemas de la vida, y, entonces, se muestra como una persona triste, que todo el tiempo lamenta, llora, reclama, porque ella está descontenta con el mundo, y, ella espera el cielo, entonces vive aquí de cabeza baja, todo el tiempo triste, lamentando, y, no, ese tipo de pensamiento no tiene nada que ver, está completamente fuera de lo que Jesús, dice, el desea que estemos contentos, que por causa de la fe tengamos gozo, y así nuestra alegría será completa, seremos personas realizadas, felices, viviremos de cabeza erguida, cuando escuchemos, comprendamos, y, vivamos, esta enseñanza de Jesús, y, las demás que nos ha revelado. Escrito está en el Salmo 16:11 ¨Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre.¨, entonces, quien vive en la presencia de Cristo, no vive triste, por el contrario, vive alegre, sin complicaciones, obrando con simplicidad en sus actos, aunque lógicamente en ocasiones, tenemos derecho de llorar, porque nadie es de hierro, y, no corre aceite diésel en nuestras venas, corre sangre. En este sentido, no vivamos en la tristeza, estemos gozosos porque tenemos un Dios que todo lo puede, y, nos dará lo que le pidamos, si obramos con fe, y, obramos como es dispuesto por su voluntad.
OREMOS:
Padre amado, alabado sea tu nombre, gracias por concedernos la bendición del gozo, capacítanos para usarla y disfrutarla en todo momento, permítenos glorificarte con nuestros actos. Peticiones que hacemos en nombre de Jesús.
Amen.