Éxodo 2:11-12 “En aquellos días sucedió que crecido ya Moisés, salió a sus hermanos, y los vio en sus duras tareas, y observó a un egipcio que golpeaba a uno de los hebreos, sus hermanos. Entonces miró a todas partes, y viendo que no parecía nadie, mató al egipcio y lo escondió en la arena. “
Amados, que la Paz de Dios sea con todos. Pensamientos de todas las clases, vienen a nuestra mente, en todo momento, algunos de ellos son positivos, y, nos contribuyen a seguir enfocados, avanzando, mientras otros son negativos y nos desvían del camino, pero podemos hacer algo, que: cambiara nuestras vidas para siempre, se trata de enfrentar a esos pensamientos negativos, pero de una manera particular, así, cada vez que venga uno de ellos, solo debemos detenernos a sustituir ese pensamiento, por la creencia de que: Dios está obrando para nuestro bien, que debemos confiar en él. De esa manera, logramos sustituir pensamientos, y, continuar en el progreso. Animemos a nuestro prójimo, hagamos el bien, brindemos un ejemplo de obediencia a Dios, y, compartamos el mensaje.
Vamos a comenzar imaginando esta situación, vivimos en un ambiente lleno de cámaras, donde las personas pueden observar todo lo que estamos haciendo, que este ambiente es bien complicado, cada paso nuestro, cada conversación, y, hasta cada respiración, está siendo monitoreado, con ese panorama, tenemos que pensar bien lo que haremos, y, desarrollar una mejor actitud, pues estaríamos bajo una tremenda observación, y, ciertamente irían a juzgarnos, por lo que hacemos y hablamos, el texto bíblico de hoy, se refiere a un personaje que, hizo de todo para que no se descubriera nada, pero no sabía que estaba siendo observado. La biblia dice que Moisés miro hacia todos lados, antes de matar al egipcio, pero él se olvido de mirar para arriba, aunque nadie estuviera viendo, Dios estaba observando, el contexto de ese crimen, es la falsa idea de justicia aplicada por las propias manos, Moisés cuando creció comenzó a percibir las terribles condiciones en las cuales su pueblo vivía, y, ciertamente cuando él vio a un egipcio, golpeando a uno de sus hermanos, hebreos, el no se contuvo, al matar a aquel egipcio, Moisés debe haber pensado que ese sería el comienzo de la liberación de sus hermanos, con todo, cometiendo ese crimen Moisés cayó en el error, en el que tantas veces sus antepasados cayeron, hacer con las propias manos, aquello que Dios prometió hacer, no era objetivo de Dios libertar al pueblo de esa manera, usando la guerra y la violencia, el plan de Dios era liberar a los hebreos, apenas con su poder. Cuando actuamos por cuenta propia nosotros frustramos los planes de Dios, y, agarramos terribles consecuencias, después del homicidio, el príncipe de Egipto, intento esconder su crimen debajo de la arena, pero no demoro mucho para que el viento trajera a tono aquello que el creía que jamás se descubriría. Establece el versículo, Hebreos 4:13 ¨Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.¨, no existe nada encubierto, Dios lo sabe y lo ve todo, por tanto es innecesario enterrar cosas debajo de la arena, ese es un esfuerzo en vano, porque Dios todo lo sabe, y, lo ve, por tanto simplemente, precisamos actuar correctamente, ser íntegros en todos nuestros actos, y, manifestar una conducta agradable a Dios.
OREMOS:
Padre Amado, ayudanos a proceder de manera correcta, a ser mejores siervos, para llevar a mas almas a tus caminos, y, mostrar un buen ejemplo, que incentive al prójimo, a seguirte. Contribuye con nosotros. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo en nombre de quien todo lo concedes.
Amen