Proverbios 1:1 ¨ Los proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel.¨
Avanzar continuamente en los caminos del Señor es necesario, para que tengamos una mejor vida, mostremos una conducta ejemplar y podamos transmitir a nuestro prójimo un testimonio sensacional sobre el poder de Dios. Compartamos este mensaje para extender la cadena de bendición.
En la biblia sagrada hay lecciones cuyas enseñanzas sin oportunas para suplir las necesidades de nuestro corazón y los ángeles de nuestra alma, en la palabra del Señor encontramos orientaciones bien adecuadas para nuestros problemas cotidianos, y para la vida en su conjunto. En este versículo que es el primero del libro de proverbios, esos dos propósitos son conocidos por Dios, aquello que somos por nacimiento y aquello en que nos convertimos por adquisición, por nacimiento adquirimos las características de nuestros padres, y por adquisición aquello que conseguimos a través de la vida, Salomón dijo que él era hijo de David por nacimiento y rey de Israel por adquisición, la vida natural implica nuestro desarrollo físico y la relación con la familia, mientras la vida social engloba los logros individuales, que difieren de persona a persona, y algunos individuos se convierten en más aptos o fuertes, que otros como fue el caso de Salomón, desafortunadamente el hombre social puede ser bien diferente del hombre natural, una persona puede parecer muy simpática en la iglesia, en la sociedad, pero ser en casa carente de toda simpatía, mostrando un comportamiento odioso, el libro de proverbios muestra lo dañino que es tener dos personalidades, el hecho de ser compuestos de hombre natural y hombre social no nos impide mantener la identidad de carácter, Salomón en una parte de la vida se perdió y se perjudico, y arruino a su familia y a su reino, también podemos ser tentados a divorciar a ambas personalidades, la del hijo de David y la del rey de Israel, nosotros seremos felices si con la ayuda del Espíritu Santo, vivimos con la misma personalidad en casa y fuera de ella, pidámosle a Dios para que eso sea posible, y cree las condiciones necesarias para posibilitar que actuemos de igual manera en casa como fuera de ella.
OREMOS
Padre querida, ayúdanos para comportarnos bien, de modo agradable tanto en casa como fuera de ella. Colabora con nosotros. Así pedimos en nombre de Jesucristo.
Amen