2 Corintios 3:18 ¨ Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor. ¨
Amados, que la bendición siempre esté presente en nuestras vidas y que seamos cumplidos con todos los mandatos de Dios. Es bueno comenzar el día estudiando la palabra de Dios, que Dios sea alabado y que renueve el don de la vida cada día en nuestros corazones, y que otra vez más la palabra nos traiga a reflexión, igualmente atendamos hoy a ese llamado universal que nos fue hecho para que prediquemos la palabra y realicemos la predica del clic, compartiendo en nuestras redes sociales estos materiales, así también estaremos cumpliendo el mandato de amor al prójimo.
En los tiempos antiguos el resultado lógico de la idolatría, fue el politeísmo, esto es la creencia de que existen varios dioses, las personas inventaban más dioses porque no podían imaginar que uno solo sería suficiente, que una deidad conseguiría tomar cuenta de todo, no importa cuán grandes, bonitos o dorados los seres humanos confeccionan a sus ídolos, la única cosa que conseguiremos hacer es tornar a Dios menor, hacer imágenes para representar a Dios puede significar algunas cosas, puede significar primero pérdida de identidad, al final el ser humano fue creado con la función de ser figura representativa de Dios en la tierra, siendo así no sería necesaria la confección de ningún tipo de ídolo, segundo la idolatría, el único a ser reverenciado, es Dios y crear imágenes es un caso de idolatría, tercero blasfemia crear un ídolo a mi semejanza para ser la representatividad de Dios es querer asumir su lugar como creador, la idolatría hace que el ser humano adore cosas que no son Dioses, por eso nosotros debemos pensar que nosotros no requerimos tener ídolos, porque fuimos creados a imagen y semejanza divina, con todo la idolatría todavía sonda con mucha fuerza nuestro corazón, la idolatría la verdad revela la divinidad que existe en nosotros y nos coloca en el lugar de Dios, sin mencionar que adoramos otras cosas que no son Dios, el texto de hoy nos afirma que nosotros acabaremos tornándonos en parecidos con aquellos que nosotros contemplamos, y si contemplamos a Cristo nosotros vamos a reflejar el carácter divino, si hemos tenido ídolos en nuestras vidas, si hemos servido a otros dioses, ¿cuál ha sido la inspiración para nosotros?, ¿con quién hemos buscado semejanza?, que Dios pueda trabajar en nuestros corazones para que cualquier ídolo sea borrado y para que Jesús asuma el trono de nuestro vivir.
OREMOS:
Padre de amor, gracias por la instrucción que hoy nos ofreces, gracias por todas las bendiciones que nos otorgas y gracias porque tu palabra nos enseña a solo adorarte a ti, líbranos de todo y cualquier acto de idolatría, esas son las peticiones que hoy hacemos en nombre y por amor a Jesús.
Amen.