02 de Abril: Felices los que lloran

Mateo 5:4 ¨ Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación. ¨

 

Amados, el perdón es una herramienta liberadora que nos conduce a vivir en paz, a estar mejor, y a dejar de lado toda negatividad, hagamos del perdón una practica cotidiana, Judas tuvo un importante papel en el ministerio de Jesús, algunos solo lo vemos como un acto de deslealtad, sin embargo, si así fuese, el mismo Dios, lo hubiere impedido desde el mismo momento del llamado de Judas al discipulado, sin embargo, la verdad es que Judas contribuyó para beneficio de la humanidad. Desarrollemos nuestras actividades, sigamos adelante, si existen algunos judas en nuestras vidas, vamos a lidiar con ellos, o, incluso ignorarlos, al final con ese maravilloso actuar Dios va a galardonarnos con su favor. Compartamos este material.

 

 

Jesús cuando dice ¨Felices los que lloran¨, pareciera que hace una afirmación contradictoria, pero la verdad, es que el llanto es una expresión que también puede denotar alegría, sorpresa, o, gratitud, pero normalmente, el llanto expresa tristeza, por algo que nos lastima, la felicidad de los que lloran es que pronto llegara el consuelo, claramente, el llanto al que Jesús se refiere es en el sentido de reconocer nuestra pequeñez, nuestra indignidad, nuestra pobreza espiritual, nuestra carencia, y, nuestra insuficiencia, aquellos que reconocen que son indignos porque son pecadores, ellos entristecen por eso, ellos lamentan su condición espiritual. Porque ellos lamentan su real condición delante de Dios. Pedro negó 3 veces a Jesús, aquella noche que Jesús fue arrestado para ser crucificado, a Pedro le preguntaron 3 veces sobre si conocía a Jesús, y, el negó eso, pero en cierto momento Pedro miro a Jesús, y lloro amargamente, porque reconoció su pequeñez ante Dios,  y desde ese momento Pedro se convierte en un nuevo hombre, porque Pedro se arrepintió, confeso su pecado y fue perdonado por Dios, y por eso Jesús declara bienaventurados a los que lloran porque recibirán consuelo, pero para recibir ese consuelo, ellos deben buscar a Dios, entonces, vamos a buscar a Dios.

 

 

 

OREMOS:

 

Amado Padre, es un placer alabarte cada día desde temprano, y, realizando buenas obras, ayúdanos a experimentar la felicidad de cumplir tu voluntad, y, mejorar nuestras vidas, permite que nuestras conductas reflejan al prójimo un buen ejemplo, y, podamos llevar a más almas a tus caminos. Contribuye con nosotros siempre. Peticiones que hacemos en nombre de Jesucristo, tu hijo, en nombre de quien todo lo concedes.

 

Amen.

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